Ros-Lehtinen y el Papa Francisco: Sionismo y jesuitismo
(A propósito de un artículo de Jean Guy Allard y la “gira pastoral”)
rubèn ramos
Jean-Guy Allard, periodista canadiense que vive en Cuba y escribe en Granma, hace una interpretación antojadiza y fuera de la historia al decir que la sionista Ros-Lehtinen “cometió una falta de respeto al comparar el jefe de la Iglesia católica a Taylor Swift, una cantante popular”(sic).
De lo dicho por la congresista judío-cubana, no se deduce que haya hecho comparación alguna. (Leer artículo en http://www.contrainjerencia.com/ del 19-09-15).
Del resto de afirmaciones que el periodista de Granma hace sobre la congresista Ros-Lehtinen, sobre el Papa jesuita, las iglesias y sectas satánico-religiosas, diré lo siguiente:
- Sionismo y Jesuitismo son lo mismo. Igual que jesuitismo y sectas de ultraderecha, más o menos, “satánicas” como Skull and Bones, a la que pertenecen los Bush, y que fue creada por los jesuitas. Como deben estar detrás de cuanta “Iglesia de Cienciología” existe. No sólo en EEUU, también, en México y América del Sur. Seguramente, en Cuba y en el resto del Caribe. Y, en Canadá. Total sus objetivos son muy coincidentes con los que el soldado “Templario”, Ignacio de Loyola, impuso para su “Compañía” de milicianos.
- La supremacía jesuítica en EEUU y en el control del Congreso de este país, al que pertenece la señora Ros, viene desde muy lejos. El señor Allard debe saberlo. En todo caso, allí está la historia. Sobre todo, la que se corresponde con la alianza jesuítico-masónica y sionista.
- La alianza jesuítica con la “Iglesia Episcopal”, donde “milita” Ros-Lehtinen se remite a Carlos I heredero de Jacobo I. Si bien éste proscribió a los “milicianos negros” de Ignacio de Loyola, su hijo Carlos, fue más permeable. Tanto que, al terminar en el cadalso, se dice, culpó de este hecho a los jesuitas. Después, tanto Cromwell, como Carlos II, igual los perseguirían. Pero los jesuitas no cesaron en sus intrigas y conspiraciones. Lo que importa es que, desde entonces, las liturgias de las dos iglesias (episcopal y jesuítica) se habrían hecho muy semejantes.
- El periodista Allard debe recordar que desde Canadá fue que entraron los jesuitas a EEUU para sentar su actual supremacía que empezó en Maryland, la “Tierra de María”.
- En este sentido, la visita del Papa Francisco a EEUU, no es para nada gratuita. Tampoco lo fue la que acaba de terminar a Cuba. El “Nuevo Orden Mundial” (NOM) no pasa por terminar con el “bloqueo” y la devolución de Guantánamo. Tiene que ver con la estrategia de recuperación del “Patio trasero” para la hegemonía jesuítico-sionista.
- El NOM, bajo la hegemonía jesuita (después de alcanzado los propósitos del ecumenismo), en alianza con el poder económico y militar masónico-sionista, es el objetivo que los “humildes perfectísimos” de Ignacio de Loyola, se impusieron al crear la secta de los Illuminati allá por 1776. Esto les permitió actuar desde la sombra después que su Orden fue prohibida por el Papa Clemente XIV en 1773; impulsar la Independencia de EEUU en 1776 y, trece años después, la Revolución Francesa. En 1814, a través de Napoleón, lograron que el Papa Pío VII restituyera la Orden y sus privilegios. Para entonces, ya habían infiltrado el Vaticano, como las iglesias y sectas protestantes. Los jesuitas están hoy en la etapa final de la “globalización” de su poder, junto al sionismo euro-estadounidense-israelí.
- En la supuesta falta de respeto al Papa de parte de la sionista Ileana Ros, quien debería sentirse ofendida es Taylor Swift la cantautora que, con su música, está extremadamente lejos de hacer el daño que los jesuitas le siguen haciendo y le harán a la humanidad en nombre de Dios, la fe y la esperanza.