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David Díaz Ríos

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3 de Abril de 2011, 21:00 , por Desconhecido - | No one following this article yet.

Dama corrupta

7 de Novembro de 2015, 15:59, por David Díaz Ríos

Dama corrupta

 
¿Estará Berta Soler ( al centro) perdiendo el apoyo de la mafia anticubana de Miami?
Por Arthur González / No es la primera vez que Berta Soler, Jefa de la banda “Damas” de Blanco, financiada por Estados Unidos, es acusada de corrupción, eso es una vieja historia que tiene coletillas.
Desde que fueron creadas por el vecino del Norte para actos provocativos en las calles habaneras, las llamadas “Damas” han tenido varias metamorfosis, hasta llegar a las actuales.
Al fallecer Laura Pollán, la grosera e inculta Berta Soler, se apoderó de la dirección de la banda con el único fin de sacarle provechos económicos, algo denunciado con reiteración por varias de sus fundadoras, hoy residentes en Miami.
Es conocido que la grosera Presidenta, es apoyada por una miembro de la Fundación Nacional Cubano Americana, nombrada Laly Samper, a quien le solicitó dinero en diferentes etapas para la compra de una casa, que, según Berta, serviría de sede permanente de su grupúsculo.

Bajo ese argumento, intentó adquirir un edificio de tres plantas que vendían en 250 mil dólares en el barrio del Vedado, porque su sueño era abandonar para siempre el reparto obrero de Alamar. Ante la negativa de Laly, optó por cambiar el departamento en el mismo reparto, pero en una zona más favorecida.
Constantes quejas se conocen de sus subordinadas, al acusar a la grosera Jefa de “no repartir con equidad el dinero que envían desde Estados Unidos, para mantener las actividades provocativas”, observando como Berta y su familia han transformado sus imagenes producto de los dólares que se embolsa.
El escandalo más reciente de la inculta y grosera fue publicado por el diario El Nuevo Herald, quien denunció que la cabecilla de las “Damas” se apropió nuevamente de miles de dólares  remitidos desde Miami, supuestamente por la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba, organización pantalla empleada para ocultar al Departamento de Estado y a la CIA.
Pero lo más significativo del caso es que su fiel aliado de campañas difamatorias contra el Gobierno cubano, Guillermo Fariñas, amigo íntimo del asesino terrorista Luis Posada Carriles, acusó a Berta de estafadora, y explicó que se creó una comisión interna en las “Damas”, para estudiar documentos sobre los fondos del grupúsculo contrarrevolucionario, comprobándose el defalco cometido por la pícara Presidenta.
Entre las informaciones que salieron a relucir están: la apropiación de 37 mil pesos cubanos convertibles para comprar el departamento en Alamar.
El desvió de 10 mil pesos cubanos convertibles destinados a las “Damas”, para comprar la canastilla de su hija,  que como se conoce, salió embarazada durante su estancia en el Miami Dade College, en una noche de orgías en las que participó, desconociéndose quién es el autor de la criatura.
Por si fuera poco, la auditoría pudo comprobar que Berta hurtó otros 85 mil pesos cubanos convertibles para finalmente hacer realidad su anhelo de comprarse una lujosa residencia en reparto habanero de Santos Suárez, además de comprarle un auto a su esposo Ángel Moya, en 40 mil pesos cubanos convertibles.
Otros datos demostraron que la pícara Presidenta gastó 17 mil usd en compras realizadas durante su estancia en Panamá, cuando participó el show mediático durante la Cumbre de Las Américas.
Como dato final, se asegura que existe un faltante de 27 mil 542 pesos cubanos convertibles, pero no ha sido posible determinar en qué fueron consumidos.
Una de las participantes en la auditoria le expresó a Berta Soler que “ era inconcebible que escondiera los 50 mil usd recibidos por el Premio Sajarov”, algo que la inculta pero pícara señora insiste en afirmar que “los tiene guardados para esperar el momento preciso para invertirlos”.
Según explicó El Nuevo Herald, al tratar de comunicarse con Berta Soler y ni ella ni su esposo respondieron al teléfono.
Esa historia es muy añeja, incluso el propio jefe de la Sección de Intereses de Estados Unidos en la Habana, Jonathan Farrar, lo escribió el 15.04.2009, en uno de sus informes secretos remitidos a la CIA y el Departamento de Estado, donde señaló:
[…] “Disidentes de larga data… están más preocupados por tener mayores oportunidades para viajar libremente y vivir de manera confortable”.
“[…] Dirigen sus mayores esfuerzos a obtener recursos suficientes para solventar las necesidades del día a día de los principales organizadores y sus seguidores…”
No hay duda alguna, ser contrarrevolucionario es un excelente oficio en Cuba, pues sin necesidad de trabajar, se reciben cientos de miles de dólares que envía Estados Unidos de los impuestos que pagan los ciudadanos estadounidenses, para que en la Isla los “disidentes” disfruten de las bondades del Caribe.
Berta se transformó ante la vista de todos, de una  cubanasencilla en una “top model”, con el dinero que le robó a sus subordinadas; solo hay que ver para creer.
 
Al respecto José Martí dijo:
“¡Mejor una lección merecida y un poco de pobreza pasajera, que el título de ladrones!”.
 
 
FUENTE:



Cuba es un país que ha mostrado una inmensa capacidad de lucha y negociación

7 de Novembro de 2015, 12:21, por David Díaz Ríos

Cuba es un país que ha mostrado una inmensa capacidad de lucha y negociación.Por Pablo González Casanova

Fragmento del texto del autor “Cuba y el futuro de la humanidad” en La Jornada
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Advertir las posibilidades concretas que el proyecto cubano tiene, y reconocer en él la realización universal de un anhelo histórico que respete la diversidad de creencias, de ideologías, de razas, sexos, inclinaciones sexuales y edades y que con la Justicia social e individual hermane la Libertad, y haga de ambas sus principal valor y meta, será reconocer lo nuevo en la dialéctica de la historia o la nueva dialéctica de la historia.
Cuba es un país que ha mostrado una inmensa capacidad de lucha y negociación, sin que en ningún momento de la lucha o la negociación haya renunciado a sus valores y objetivos centrales. La nueva dialéctica parece indicar que en el futuro se darán fenómenos de lucha y negociación y que en ellos, lo no negociable será el socialismo democrático y la justicia social e individual y lo que habrá de negociarse serán las alternativas y la transición a un mundo capaz de preservar la vida, la justicia, la libertad y la soberanía de pueblos, trabajadores y ciudadanos.
Sobre el camino de la resistencia y lucha de Cuba por mantener su proyecto emancipador nada puede ser más acertado que recordar aquellos discursos pedagógicos y revolucionarios de Fidel cuando en los inicios de laRevolución Cubana, durante horas y horas, en la Plaza de la Revolución hablaba a los guajiros y a su pueblo para que acrecentaran su voluntad, su conciencia y su conocimiento de los valores y metas de la Revolución. Hoy, cuando el analfabetismo ha desaparecido y la escolaridad es universal y alcanza los más altos niveles, cuando los contingentes del pueblo cubano están organizados a lo largo y ancho del país, y compenetrados en su inmensa mayoría de los valores de la revolución, y cuando a sus conocimientos, su conciencia y su voluntad añaden su capacidad para tomar decisiones cruciales en el gobierno de la Isla, como ha ocurrido en numerosas ocasiones en que Cuba mostró claramente la imposibilidad de que una guerra internacional o civil lograra destruirla, nada mejor para ganar la nueva lucha que plantean las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, que hacer efectivas las palabras del reciente discurso que Fidel ya no pronunció ante los campesinos y los guajiros sino ante los hijos de los mismos que lo escucharon en la Universidad de la Habana, al lado de jóvenes provenientes de esos sectores medios que se perfilan en la sociedad cubana según Fernando Martínez Heredia.
De las palabras de Fidel se deducen, con la mayor claridad, tanto la estrategia a seguir por la juventud y el pueblo de Cuba en el mundo actual, como la que seguirán los representantes del complejo–militar–empresarial–mediático y político de Estados Unidos y otros gobiernos y corporaciones del mundo capitalista, si se atreven a conocer la verdad y optan por una política que asegure la vida en el Planeta. Semejante camino, lejos de ser increíble, corresponde a una realidad que se expresa aquí y allá en el largo discurso, con expresiones y palabras como las siguientes sobre nuestra propia fuerza actual y potencial: “poseemos armas nucleares en virtud del poder invencible de las armas morales”. Esas palabras son exactas: la estrategia de la resistencia del pueblo cubano y otros pueblos está en el poder de sus armas morales y en la demostración que hagan de ellas contra la política de colusión, de cooptación, de corrupción, de intimidación que llevó a la restauración del capitalismo en el llamado campo socialista; “los jóvenes de hoy deben luchar –dijo Fidel– con las armas morales por encima de las ideas de su clase”, como han luchado a lo largo de la historia de Cuba y del Mundo, y como empezó a luchar Fidel, “hijo de terrateniente”. Y agregó: Todos los “hombres de pensamiento” leen y leerán a Martí, el que hizo de la moral un concepto revolucionario invaluable.
Y ya pensando en la Tierra, en el Planeta, Fidel exaltó “la brevísima historia de la especie humana buscando una sociedad justa… frente a un repugnante sistema” como el actual, e hizo ver que “estamos frente a una gran batalla, que debemos librar, que vamos a librar y vamos a ganar, que es lo importante”. En la lucha incluyó una y otra vez a los parásitos y sinvergüenzas que comercian en los mercados escondidos y que se encuentran entre los enemigos principales de una sociedad justa. “Estamos envueltos en una batalla —dijo textualmente—contra vicios, contra desvío de recursos, contra robos, y allí está esa fuerza con la que no contábamos antes de la batalla de las ideas, diseñada para librar esa batalla”.
“En esa batalla no debe haber tregua con nadie” –añadió–. “Cada cosa se llamará por su nombre” y “se apelará al honor de cada sector”, sin que la autocrítica se quede en autocrítica, sino se sancione el inmenso daño que hacen “los sinvergüenzas”. Son las palabras que empleó. Y a ellas Fidel añadió ese tipo de resistencia en lucha frente a lo que el imperialismo usa como un arma poderosísima: elindividualismo, la traición al proyecto emancipador por interés personal o familiar, o de grupo y clientela, y que atendiendo a ese interés limitado hace un daño inmenso al interés general de la liberación, de la emancipación, de la revolución. Y también recordó una experiencia personal muy importante para la acción ecuménica de Cuba, en que habiendo pasado del comunismo utópico al marxismo, cuando había ido a Chile en l971 había confirmado que a su respeto de las ideas religiosas, era necesario añadir, con la Teología de la Liberación, “la idea de unir fuerzas y luchas” y a ese respecto trajo nuevamente a cuentas la moral como fuerza. Dijo: “los valores éticos son esenciales, sin valores éticos no hay valores revolucionarios”.
Muchas otras líneas de conducta para la estrategia de la resistencia y la lucha por la justicia, la libertad y la vida se deducen del texto; pero quiero limitarme a los problemas que Fidel plantea a todo el mundo con la siguiente pregunta: ¿”Pueden o no impedir los hombres… puede o no impedir la sociedad que las revoluciones se derrumben”? Y él hace ver que si se lucha con honestidad, con seriedad, con disciplina, con trabajo incansable, y si se reconoce que no se sabe cómo va a ser todo el proceso histórico que viene, ni todo lo que vamos a ir descubriendo, y si se reconoce que estamos decididos a enseñar y aprender, y se recuerda que no puede uno confiar en el imperialismo y que hay “millones de cubanos preparados para la guerra de todo el pueblo”, y si se logra “la ausencia total del miedo”…. no sólo se preservarán los logros de la revolución sino “se podrá decir en la voz de millones o de cientos de miles de millones: “¡Vale la pena haber nacido! ¡Vale la pena haber vivido!”.
Y con esas palabras termino las mías seguro de que Cuba y la Humanidad alcanzarán la justicia y la vida en la tierra.
 
 
 
Artículo completo de:
 
Cuba y el futuro de la humanidad. Por Pablo González Casanova
 
 
 
Publicado por: David Díaz Ríos



Operación Carlota (Cuba-Angola), según Gabriel García Márquez

6 de Novembro de 2015, 16:53, por David Díaz Ríos

Operación Carlota (Cuba-Angola), según Gabriel García Márquez

Operación Carlota (sobre Cuba y Angola), según Gabriel García Márquez
Por primera vez en una declaración oficial Estados Unidos reveló la presencia de tropas cubanas en Angola en noviembre de 1975.
El encuentro también servirá para recordar la contribución cubana a la independencia de Angola y a los combatientes de la Isla caídos allí
 
Este artículo de Gabriel García Márquez, tomado de la revista Tricontinental, edición 53, de 1977, sólo recoge la primera etapa de la "Operación Carlota", pues el autor concluye con la derrota de las fuerzas que invadieron a la nación angolana y el inicio de la retirada gradual de las tropas cubanas en 1976, cuando parecía que todo había terminado. Sin embargo, tal y como habían acordado los presidentes Fidel Castro y Agostinho Neto, un número mínimo de tropas permaneció en Angola para asegurar su soberanía.
 
La situación se fue complicando, nuevamente se intensificó la lucha, otra vez Sudáfrica metió sus manos, de manera que se inició una nueva etapa de la "Operación Carlota", que no concluyó sino 14 años más tarde, definitivamente derrotados los racistas sudafricanos.
 
Únicamente entonces regresó el último soldado cubano.
 
Era mayo del año 1991.
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Operación Carlota
 
Por Gabriel García Márquez

Tropas cubanas en Angola
 
Por primera vez en una declaración oficial Estados Unidos reveló la presencia de tropas cubanas en Angola en noviembre de 1975. Calculaba entonces que el envío había sido de 15 mil hombres. Tres meses después, durante una breve visita a Caracas, Henry Kissinger le dijo en privado al presidente Carlos Andrés Pérez: "Cómo estarán de deteriorados nuestros servicios de información, que no nos enteramos de que los cubanos iban para Angola sino cuando ya estaban allí".
 
En esa ocasión, sin embargo, corrigió que los hombres enviados por Cuba eran sólo 12 mil. Aunque nunca explicó el motivo de aquel cambio de cifras, la verdad es que ninguna de las dos era correcta. En aquel momento había en Angola muchos hombres de tropa y especialistas militares y técnicos civiles cubanos, y eran más de cuantos Henry Kissinger pretendía suponer. Había tantos barcos cubanos anclados en la bahía de Luanda, que el presidente Agostinho Neto, contándolos desde su ventana, sintió un estremecimiento de pudor muy propio de su carácter, "No es justo", le dijo a un funcionario amigo. "A este paso, Cuba se va a arruinar".
 
Es probable que ni los mismos cubanos hubieran previsto que la ayuda solidaria al pueblo de Angola había de alcanzar semejantes proporciones. Lo que sí tuvieron claro desde el primer momento es que la acción tenía que ser terminante y rápida, y que de ningún modo se podía perder.
 
Los contactos entre la Revolución cubana y el Movimiento Popular de Liberación de Angola (MPLA) se habían establecido por primera vez y habían sido muy intensos desde agosto de 1965, cuando el Che Guevara participaba en las guerrillas del Congo. El año siguiente estuvo en Cuba el propio Agostihno Neto acompañado por Endo, el comandante en jefe del MPLA que había de morir en la guerra, y ambos se entrevistaron entonces con Fidel Castro. Luego, y por las propias condiciones de la lucha en Angola, aquellos contactos se habían vuelto eventuales.
 
Sólo en mayo de 1975, cuando los portugueses se preparaban para retirarse de sus colonias de África, el comandante cubano Flavio Bravo se encontró en Brazzaville con Agostinho Neto, y éste le solicitó una ayuda para transportar un cargamento de armas, y además le consultó la posibilidad de una asistencia más amplia y específica. En consecuencia, el comandante Raúl Díaz Argüelles se trasladó tres meses después a Luanda al frente de una delegación civil de cubanos, y Agostinho Neto fue entonces más preciso aunque no más ambicioso: solicitó el envío de un grupo de instructores para fundar y dirigir cuatro centros de entrenamiento militar.
 
Bastaba un conocimiento superficial de la situación de Angola para comprender que el pedido de Neto era también típico de su modestia. Aunque el MPLA, fundado en 1956, era el movimiento de liberación más antiguo de Angola, y aunque era el único que estaba implantado con una base popular muy amplia y ofrecía un programa social, político y económico acorde con las condiciones propias del país, era sin embargo el que se encontraba en una situación militar menos ventajosa.
 
Disponía de armamento soviético, pero carecía de personal preparado para manejarlo. En cambio, las tropas regulares de Zaire, bien entrenadas y abastecidas, habían penetrado en Angola desde el 25 de marzo y habían proclamado en Carmona un Gobierno de hecho presidido por Holden Roberto, dirigente del FNLA, y cuñado de Mobutu, y cuyas vinculaciones con la CIA eran del dominio público.
 
En el Oeste, bajo el amparo de Zambia, se encontraba la UNITA, al mando de Jonas Savimbi, un aventurero sin principios que había estado en colaboración constante con los militares portugueses y las compañías extranjeras de explotación. Por último, las tropas regulares de África del Sur, a través del territorio ocupado de Namibia, habían cruzado la frontera meridional de Angola el 5 de agosto, con el pretexto de proteger las presas del complejo hidroeléctrico de Raucana-Caluaqua.
 
Todas esas fuerzas con sus enormes recursos económicos y militares estaban listas para cerrar en torno a Luanda un círculo irresistible en las vísperas del 11 de noviembre, cuando el ejército portugués abandonara aquel vasto, rico y hermoso territorio donde había sido feliz durante quinientos años. De modo que cuando los dirigentes cubanos recibieron el pedido de Neto, no se atuvieron a sus términos estrictos, sino que decidieron mandar de inmediato un contingente de 480 especialistas que en un plazo de 6 meses debían instalar cuatro centros de entrenamiento y organizar 16 batallones de infantería, así como 25 baterías de mortero y ametralladoras antiaéreas. Como complemento mandaron una brigada de médicos, 115 vehículos y un equipo adecuado de comunicaciones.
 
Aquel primer contingente se transportó en tres barcos improvisados. (...) Como estaba previsto, los instructores cubanos fueron recibidos por el MPLA, y pusieron a funcionar de inmediato las cuatro escuelas de instructores. Una en Delatando, que los portugueses llamaban Salazar, a 300 kilómetros al Este de Luanda; otra en el puerto atlántico de Benguela; otra en Saurino, antiguo Enrique de Carvalho, en la remota y desierta provincia oriental de Lunda, donde los portugueses habían tenido una base militar que destruyeron antes de abandonarla, y la cuarta en el enclave de Cabinda. Para entonces estaban las tropas de Holden Roberto tan cerca de Luanda, que un instructor de artillería cubana les estaba dando las primeras lecciones a sus alumnos de Delantando, y desde el sitio en que se encontraba veía avanzar los carros blindados de los mercenarios.
 
El 23 de octubre, las tropas regulares de Africa del Sur penetraron desde Namibia con una brigada mecanizada, y tres días después habían ocupado sin resistencia las ciudades de Sada Bandeira y Moçamedes. Era un paseo dominical. Los sudafricanos llevaban equipos de casettes con música de fiesta instalados en los tanques. En el Norte, el jefe de una columna mercenaria dirigía las operaciones a bordo de un Honda deportivo, junto a una rubia de cine. Avanzaba con un aire de vacaciones, sin columna de exploración, y ni siquiera debió darse cuenta de dónde salió el cohete que hizo volar el coche en pedazos. En el maletín de la mujer sólo se encontró un traje de gala, un bikini y una tarjeta de invitación para la fiesta de la victoria que Holden Roberto tenía ya preparada en Luanda.
 
A fines de esa semana los sudafricanos habían penetrado más de 600 kilómetros en territorio de Angola, y avanzaban hacia Luanda a unos 70 kilómetros diarios. El 3 de noviembre habían agredido al escaso personal del centro de instrucción para reclutas de Benguela. Así que los instructores cubanos tuvieron que abandonar las escuelas para enfrentarse a los invasores con sus aprendices de soldados, a los cuales impartían instrucciones en las pausas de las batallas. Hasta los médicos revivieron sus prácticas de milicianos y se fueron a las trincheras.
 
Los dirigentes del MPLA, preparados para la lucha de guerrillas pero no para una guerra masiva, comprendieron entonces que aquella confabulación de vecinos, sustentada por los recursos más rapaces y devastadores del imperialismo, no podía ser derrotada sin una apelación urgente a la solidaridad internacional.
 
El espíritu internacionalista de los cubanos es una virtud histórica. Aunque la Revolución lo ha defendido y magnificado de acuerdo con los principios del marxismo, su esencia se encontraba muy bien establecida en la conducta y la obra de José Martí. Esa vocación ha sido evidente -y conflictiva- en América Latina, África y Asia.
 
(...)
 
La posibilidad de que Estados Unidos interviniera de un modo abierto, y no a través de mercenarios y de África del Sur, como lo había hecho hasta entonces, era sin duda uno de los enigmas más inquietantes. Sin embargo, un rápido análisis permitía prever que por lo menos lo pensaría más de tres veces cuando acababa de salir del pantano de Vietnam y del escándalo de Watergate, con un presidente que nadie había elegido, con la CIA hostigada por el Congreso y desprestigiada ante la opinión pública, con la necesidad de cuidarse para no aparecer como aliado de la racista África del Sur, no sólo ante la mayoría de los países africanos, sino ante la propia población negra de Estados Unidos, y además en plena campaña electoral y en el flamante año del bicentenario.
 
Por otra parte, los cubanos estaban seguros de contar con la solidaridad y la ayuda material de la Unión Soviética y otros países socialistas, pero también eran conscientes de las implicaciones que su acción podría tener para la política de la coexistencia pacífica y la distensión internacional. Era una decisión de consecuencias irreversibles, y un problema demasiado grande y complejo para resolverlo en 24 horas. En todo caso, la dirección del Partido Comunista de Cuba no tuvo más de 24 horas para decidir y decidió sin vacilar, el 5 de noviembre, en una reunión larga y serena.
 
Al contrario de lo que tanto se ha dicho, fue un acto independiente y soberano de Cuba, y fue después y no antes de decidirlo que se hizo la notificación correspondiente a la Unión Soviética.
 
Otro 5 de noviembre como aquél, en 1843, una esclava del ingenio Triunvirato de la región de Matanzas, a quien llamaban la Negra Carlota, se había alzado machete en mano al frente de una partida de "esclavos, y había muerto en la rebelión. Como homenaje a ella, la acción solidaria en Angola llevó su nombre: Operación Carlota.
 
La Operación Carlota se inició con el envío de un batallón reforzado de tropas especiales, compuesto por 650 hombres. Fueron transportados por avión en vuelos sucesivos durante 13 días desde la sección militar del aeropuerto José Martí, en La Habana, hasta el propio aeropuerto de Luanda, todavía ocupado por tropas portuguesas.
 
Su misión específica era detener la ofensiva para que la capital de Angola no cayera en poder de las fuerzas enemigas antes de que se fueran los portugueses y luego sostener la resistencia hasta que llegaran refuerzos por mar. Pero los hombres que salieron en los dos vuelos iniciales iban ya convencidos de llegar demasiado tarde, y sólo abrigaban la esperanza final de salvar Cabinda.
 
(...)
 
La prensa cubana, por normas de seguridad, no había publicado la noticia de la participación en Angola. Pero como suele ocurrir en Cuba aun con asuntos militares tan delicados como ése, la operación era un secreto guardado celosamente entre ocho millones de personas. El Primer Congreso del Partido Comunista, que había de realizarse pocas semanas después y que fue una especie de obsesión nacional durante todo el año, adquirió entonces una dimensión nueva.
 
El procedimiento empleado para formar las unidades de voluntarios fue una citación privada a los miembros de la primera reserva que comprende a todos los varones entre los 17 y los 25 años, y a los que han sido miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias. Se le citaba por telegrama al Comité Militar correspondiente sin mencionar el motivo de la convocatoria, pero el motivo era tan evidente que todo el que se creyó con capacidad militar se precipitó sin telegramas previos ante su comité respectivo, y mucho trabajo costó impedir que aquella solicitud masiva se convirtiera en un desorden nacional.
 
Hasta donde lo permitió la urgencia de la situación, el criterio selectivo fue bastante estricto. No sólo se tomaron en cuenta la calificación militar y las condiciones físicas y morales, sino también los antecedentes de trabajo y la formación política. A pesar de ese rigor, son incontables los casos de voluntarios que lograron burlar los filtros de selección.
 
Se sabe de un ingeniero calificado que se hizo pasar por chofer de camión, de un alto funcionario que logró pasar como mecánico, de una mujer que estuvo a punto de ser admitida como soldado raso. Se sabe de un muchacho que se fue sin permiso de su padre, y que más tarde se encontró con él en Angola, porque también su padre se había ido a escondidas de la familia. En cambio, un sargento de 20 años no consiguió que lo mandaran por ningún medio, y sin embargo tuvo que soportar con el machismo herido, que mandaran a su madre, que es periodista, y a su novia, que es médico. Algunos delincuentes comunes, desde la cárcel, pidieron ser admitidos, pero ninguno de esos casos fue contemplado.
 
(...)
 
Durante nueve meses, la movilización de recursos humanos y materiales fue toda una epopeya de temeridad. Los decrépitos Britannia remendados con frenos del Illushin 18 soviético mantuvieron un tráfico constante y casi inverosímil. Aunque su peso de despegue normal es 185 mil libras, llegaron a volar muchas veces con 194 mil, lo cual se sale de todas las tablas. Los pilotos, cuyas horas normales de vuelo deben ser 75 al mes, alcanzaron a volar más de 200. En general, cada uno de los tres Britannia en servicio llevaba dos tripulaciones completas que se turnaban durante el vuelo. Pero un solo piloto recuerda haber estado en su asiento hasta 50 horas en un viaje de ida y vuelta, con 43 horas de vuelo efectivo. "Hay momentos en que uno está tan cansado que ya no se puede cansar más", ha dicho sin pretensiones de heroísmo.
 
En aquellas condiciones debido a las diferencias de horas, los pilotos y las azafatas habían perdido la cuenta del tiempo, y su única orientación eran las solicitudes del cuerpo: comían sólo cuando tenían hambre y dormían sólo cuando tenían sueño.
 
La ruta de La Habana a Luanda es desamparada y desierta. A la altura de crucero de los Britannia, que es entre 18 mil y 20 mil pies, la información sobre vientos es inexistente en estos tiempos del Jet. Los pilotos salían en cualquier sentido sin saber cuál era el estado de la ruta, volando a alturas indebidas para economizar combustible, y sin la menor idea de cuáles serían las condiciones al llegar.
 
Entre Brazzaville y Luanda, que era el tramo más peligroso, no tenían aeropuerto alterno. Además los militares viajaban con las armas cargadas, y se transportaban explosivos sin cajas y proyectiles sin thermos para reducir la carga.
 
(...)
 
El transporte marítimo no fue menos dramático. En los dos últimos barcos para pasajeros, de 4 mil toneladas cada uno, se adaptaron como dormitorios todos los espacios libres, y se improvisaron letrinas en el cabaret, los bares y los corredores. Su cupo normal de 226 pasajeros se triplicó en algunos viajes. Los buques de carga para 800 personas llegaron a transportar más de mil pasajeros con carros blindados, armamentos y explosivos. Fue necesario adapta cocinas de campaña en las bodegas de carga y en los alones.
 
Para economizar agua se usaban platos desechables y en vez de vasos se utilizaron recipientes de yogurt. Los tanques de lastre se usaban para el aseo y se adaptaron en cubierta unas 50 letrinas que se descargaban por la borda. Las máquinas cansadas de los barcos más viejos empezaban a resistirse al cabo de seis meses de rendimiento excepcional.
 
Ese fue el único motivo de exasperación para los primeros repatriados, cuyo ansiado regreso se retrasó varios días porque al Vietnam Heroico se le tupían los filtros. Las otras unidades del convoy se veían forzadas a esperarlo, y alguno de sus pasajeros comprendió entonces al Che Guevara cuando afirmó que la marcha de una guerrilla está determinada por el hombre que menos avanza.
 
Aquellos obstáculos parecían más angustiosos en esa época, porque los barcos cubanos eran objeto de toda clase de provocaciones por destructores norteamericanas que los asediaban durante días enteros, y los aviones de guerra los fotografiaban y hostigaban con vuelos rasantes. A pesar de las duras condiciones de aquellos viajes de casi veinte días, no se presentó ningún problema sanitario grave. En los 42 viajes que se hicieron durante los seis meses de la guerra, los servicios médicos de a bordo no tuvieron que hacer sino una operación de apendicitis y otra de hernia, y sólo tuvieron que combatir un brote diarreico provocado por una carne enlatada. En cambio, hubo que controlar una epidemia más difícil, que era la de los tripulantes que a toda costa querían quedarse peleando en Angola.
 
Uno de ellos, oficial de la reserva, se procuró como pudo un uniforme verde oliva, desembarcó confundido con la tropa, y consiguió quedarse de contrabando. Fue uno de los buenos oficiales de información que se destacaron en la guerra. Por otra parte, la ayuda material soviética, que entraba por distintos canales requería la llegada constante de personal calificado para manejar y enseñar a manejar armas nuevas y equipos complejos que todavía eran desconocidos para los angolanos.
 
El jefe del Estado Mayor cubano en persona se trasladó a Angola a fines de noviembre. Todo parecía entonces admisible, menos perder la guerra. Sin embargo, la verdad histórica es que estaba a punto de perderse. En la primera semana de diciembre la situación era tan desesperada, que se pensó en la posibilidad de fortalecerse en Cabinda y salvar una cabeza de playa en torno a Luanda para iniciar la evacuación. Para colmo de angustias, aquella perspectiva sombría se presentaba en el peor momento, tanto para los cubanos como para los angolanos.
 
Los cubanos se preparaban para el Primer Congreso del Partido, entre el 17 y el 22 de diciembre, y sus dirigentes eran conscientes de que un revés militar en Angola era un golpe político mortal. Por su parte, los angolanos se preparaban para la inminente conferencia de la Organización de Unidad Africana, y hubieran querido asistir con una posición militar más propicia para inclinar a su favor a la mayoría de los países africanos.
 
Las adversidades de diciembre se debían en primer lugar al tremendo poder de fuego del enemigo, que para esa fecha había recibido ya de Estados Unidos más de 50 millones de dólares de ayuda militar. Se debía en segundo lugar al retraso con que Angola pidió la ayuda cubana, y a la lentitud forzosa en el transporte de los recursos. Y se debía en último término a las condiciones de miseria y retraso cultural que dejó en Angola medio milenio de colonialismo sin alma. Más que los dos primeros, fue este último punto el que creó las dificultades mayores para la integración decisiva entre los combatientes cubanos y el pueblo armado de Angola. (...)
 
Era una guerra atroz, en la cual había que cuidarse tanto de los mercenarios como de las serpientes, y tanto de los cañones como de los caníbales. Un comandante cubano en pleno combate, cayó en una trampa de elefantes. Los africanos negros, condicionados por su rencor atávico contra los portugueses, fueron hostiles en un principio a los cubanos blancos.
 
Muchas veces, sobre todo en Cabinda, los exploradores cubanos se sentían delatados por el telégrafo primitivo de los tambores de comunicación, cuyo tam tam se escuchaba hasta 35 kilómetros a la redonda. Por su parte, los militares blancos de África del Sur, que disparaban contra las ambulancias con cañones 140, echaban cortinas de humo en el campo de batalla para recoger a sus muertos blancos, pero dejaban a los negros a disposición de los buitres.
 
En la casa de un ministro de la UNITA que vivía con el confort propio de su rango, los hombres del MPLA encontraron dentro de un refrigerador las vísceras sobrantes y varios frascos con la sangre congelada de los prisioneros de guerra que se habían comido.
 
A Cuba no llegaban sino malas noticias. El 11 de diciembre, en Hengo, donde se estaba lanzando una fuerte ofensiva de las FAPLA contra los invasores de África del Sur, un carro blindado de Cuba con cuatro comandantes a bordo se aventuró por un sendero donde ya los zapadores habían detectado algunas minas. A pesar de que antes habían pasado cuatro carros ilesos, los zapadores advirtieron al blindado que no tomara esa ruta cuya única ventaja era ganar unos minutos que por lo demás no parecían necesarios.
 
Apenas entró en el sendero el carro fue lanzado al aire por una explosión. Dos comandantes del batallón de tropas especiales quedaron heridos de gravedad. El comandante Raúl Díaz Argüelles, comandante general de las operaciones internacionalistas en Angola, héroe de la lucha contra Batista y un hombre muy querido en Cuba, quedó muerto en el acto. Fue una de las noticias más amargas para los cubanos, pero no había de ser la última de aquella mala racha. Al día siguiente ocurrió el desastre de Catofe, tal vez el más grande revés de toda la guerra.
 
Ocurrió así: una columna sudafricana había logrado reparar un puente sobre el río Nhia con una rapidez impresionable, había atravesado el río amparada por la niebla del amanecer, y había sorprendido a los cubanos en la retaguardia táctica. El análisis de ese revés demostró que se debió a un error de los cubanos.
 
Un militar europeo con mucha experiencia en la Segunda Guerra Mundial, consideró que aquel análisis era demasiado severo, manifestó más tarde a un alto dirigente cubano: "Ustedes no saben lo que es un error de guerra". Pero para los cubanos lo era, y muy grave, a sólo cinco días del Congreso del Partido.
 
(...)
 
El 22 de diciembre, en el acto de clausura del Congreso del Partido, Cuba reconoció por primera vez de manera oficial que había tropas cubanas luchando en Angola. La situación de la guerra continuaba siendo incierta. Fidel Castro, en el discurso final, reveló que los invasores de Cabinda habían sido aplastados en 72 horas, que en el Frente Norte, las tropas de Holden Roberto, que se encontraban a 25 kilómetros de Luanda el 10 de noviembre, habían tenido que retroceder a más de 100 kilómetros, y que las columnas blindadas de África del Sur, que en menos de 20 días habían avanzado 700 kilómetros fueron frenadas a más de 200 kilómetros de Luanda y no habían podido avanzar más.
 
Fue una información reconfortante y rigurosa, pero todavía estaba muy lejos de la victoria. Mejor suerte tuvieron los angolanos el 12 de enero en la conferencia de la OUA, reunida en Addis Abeba. Unos días antes, las tropas al mando del comandante cubano Víctor Schueg Colás, un negro enorme y cordial que ante de la Revolución había sido mecánico de automóviles, expulsaron a Holden Roberto de su ilustre capital de Carmona, ocuparon la ciudad, y pocas horas después tomaron la base militar de Negage.
 
La ayuda de Cuba llegó entonces a ser tan intensa, que a principios de enero había 15 barcos cubanos navegando al mismo tiempo hacia Luanda. La ofensiva incontenible del MPLA en todos los frentes, volteó para siempre la situación a su favor. Tanto, que a mediados de enero adelantó en el Frente Sur las operaciones de ofensiva que estaban previstas para abril.
 
África del Sur disponía de aviones Camberra, y Zaire operaba con Mirages y Fiat. Angola carecía de aviación, porque los portugueses destruyeron las bases antes de retirarse. Apenas si podía servirse de unos viejos DC-3 que los pilotos cubanos habían puesto en servicio, y que a veces tenían que aterrizar de noche cargados de heridos en pistas apenas alumbradas con mechones improvisados, y llegaban al lugar de destino con bejucos y guirnaldas de flores de la selva enredadas en las ruedas.
 
En cierto momento, Angola dispuso de una escuadrilla de Migs 17 con su respectiva donación de pilotos cubanos, pero fueron considerados como reserva del alto mando militar y sólo habrían sido usados en la defensa de Luanda.
 
A principios de marzo, el Frente Norte quedó liberado con la derrota de los mercenarios ingleses y gringos que la CIA reclutó de trasmano a última hora en una operación desesperada. Todas las tropas, con su estado mayor en pleno, fueron concentradas en el Sur.
 
El ferrocarril de Benguela había sido liberado, y la UNITA se desintegraba en tal estado de desorden que un cohete del MPLA, en Gago Cutinho desbarató la casa que Jonas Savimbi había ocupado hasta una hora antes.
 
Desde mediados de marzo las tropas de África del Sur iniciaron la desbandada. Debió ser una orden suprema, por temor de que la persecución del MPLA continuara a través de la sometida Namibia y llevara la guerra hasta el mismo territorio de África del Sur.
 
Aquella posibilidad habría contado sin duda con el apoyo de toda el África negra y de la gran mayoría de los países de las Naciones Unidas contrarios a la discriminación racial.
 
Los combatientes cubanos no lo pusieron en duda cuando se les ordenó trasladarse en masa al Frente Sur. Pero el 27 de marzo, cuando los sudafricanos en fuga atravesaron la frontera y se refugiaron en Namibia, la única orden que recibió el MPLA fue ocupar las presas abandonas y garantizar el bienestar de los obreros de cualquier nacionalidad.
 
El primero de abril, a las 9:15 de la mañana, la avanzada del MPLA al mando del comandante cubano Leopoldo Cintras Frías, llegó hasta la presa de Raucana, aI borde mismo de la cerca de alambre de gallinero de la frontera. Una hora y cuarto después el gobernador sudafricano de Namibia, general Ewefp, acompañado por otros dos oficiales de su ejército, pidió autorización para atravesar la frontera e iniciar las conversaciones con el MPLA.
 
EI comandante Cintras Frías los recibió en una barraca de madera construida en la franja neutral de 10 metros que separa los dos países, los delegados de ambos bandos con sus respectivos intérpretes se sentaron a discutir en torno a una larga mesa de comedor. El general Ewefp, un cincuentón rechoncho y calvo, representó lo mejor que pudo una imagen de hombre simpático y de mucho mundo, y aceptó sin reservas las condiciones del MPLA.
 
El acuerdo demoró dos horas. Pero la reunión demoró más, porque el general Ewefp hizo traer para todos un almuerzo suculento preparado del lado de Namibia, y mientras almorzaban hizo varios brindis con cerveza y contó a sus adversarios cómo había perdido el meñique de la mano derecha en un accidente de tránsito.
 
A fines de mayo Henry Kissinger visitó en Estocolmo al primer ministro sueco Olof Palme, y al salir de la visita declaró jubiloso para la prensa mundial que las tropas cubanas estaban evacuando a Angola. La noticia, según se dijo, estaba en una carta personal que Fidel Castro le había escrito a Olof Palme. El júbilo de Kissinger era comprensible, porque el retiro de las tropas cubanas le quitaba un peso de encima ante la opinión de Estados Unidos, agitada por la campaña electoral.
 
La verdad es que en esa ocasión Fidel Castro no le había mandado ninguna carta a Olof Palme. Sin embargo, la información de éste era correcta aunque incompleta. En realidad, el programa del retiro de las tropas cubanas de Angola había sido acordado por Fidel Castro y Agostinho Neto en su entrevista del 14 de marzo en Conakry, cuando ya la victoria era un hecho.
 
Decidieron que el retiro sería gradual, pero que en Angola permanecerían cuantos cubanos fueran necesarios y por el tiempo que fuera indispensable para organizar un ejército moderno y fuerte, capaz de garantizar en el futuro la seguridad interna y la independencia del país sin ayuda de nadie.
 
De modo que cuando Henry Kissinger cometió la infidencia de Estocolmo ya habían regresado a Cuba más de tres mil combatientes de Angola, y muchos otros estaban en camino. También el retorno trató de mantenerse en secreto por razones de seguridad. Pero Esther Lilia Díaz Rodríguez, la primera muchacha que se fue y una de las primeras que volvieron por avión, tuvo una prueba más del ingenio de los cubanos para saberlo todo. Esther había sido concentrada para el chequeo médico de rigor en el Hospital Naval de La Habana antes de informar a la familia de su regreso. Al cabo de 48 horas fue autorizada para salir y tomó un taxi en la esquina que la llevó a su casa sin ningún comentario, pero el chofer no quiso cobrarle el servicio porque sabía que ella regresaba de Angola. "¿Cómo lo supiste?", le preguntó Esther, perpleja. El chofer contestó: "Porque ayer te vi en la terraza del Hospital Naval, y ahí sólo están los que regresan de Angola".
 
Yo llegué a La Habana por esos días y desde el aeropuerto tuve la impresión definida de que algo muy profundo había ocurrido en la vida cubana desde que estuve allí la última vez, un año antes.
 
Había un cambio indefinible pero demasiado notable no sólo en el espíritu de la gente sino también en la naturaleza de las cosas, de los animales y del mar, y en la propia esencia de la vida cubana. Había una nueva moda masculina de vestidos enteros de tela ligera con chaquetas de manga corta. Había novedades de palabras portuguesas en la lengua callejera. Había nuevos acentos en los viejos acentos africanos de la música popular. Había discusiones más ruidosas que de costumbre en las colas de las tiendas y en los autobuses atestados, entre quienes habían sido partidarios resueltos de la acción en Angola y quienes apenas entonces empezaban a comprenderla.
 
Sin embargo, la experiencia más interesante, y rara, era que los repatriados parecían conscientes de haber contribuido a cambiar la historia del mundo, pero se comportaban con la naturalidad y la decencia de quienes simplemente habían cumplido con su deber.
 
En cambio, tal vez ellos mismos no eran conscientes de que en otro nivel, tal vez menos generoso pero también más humano, hasta los cubanos sin demasiadas pasiones se sentían compensados por la vida al cabo de muchos años de reveses injustos.
 
En 1970, cuando falló la zafra de los 10 millones, Fidel Castro pidió al pueblo convertir la derrota en victoria. Pero en realidad, los cubanos estaban haciendo eso desde hacía demasiado tiempo con una conciencia política tenaz y una fortaleza moral a toda prueba. Desde la victoria de Girón, hacía más de 15 años, habían tenido que asimilar con los dientes apretados el asesinato del Che Guevara en Bolivia y el del presidente Salvador Allende en medio de la catástrofe de Chile, y habían padecido el exterminio de las guerrillas en América Latina y la noche interminable del bloqueo, y la polilla recóndita e implacable de tantos errores internos del pasado que en algún momento los mantuvieron al borde del desastre.
 
Todo eso, al margen de las victorias irreversibles pero lentas y arduas de la Revolución, debió crear en los cubanos una sensación acumulada de penitencias inmerecidas. Angola les dio por fin la gratificación de la victoria grande que tanto estaban necesitando.
 
Fuentes:
 
Escrito por  Tomado de PL
 
Publicado por: David Díaz Ríos



MegaNet, una alternativa a Internet que será "inmune" a la vigilancia de los Gobiernos

5 de Novembro de 2015, 17:51, por David Díaz Ríos

MegaNet, una alternativa a Internet que será "inmune" a la vigilancia de los Gobiernos

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El creador del sitio web de descargas Megaupload, Kim Dotcom, ha declarado que en 2016 se pondrá en marcha la red MegaNet, que pretende ser una alternativa a Internet imposible vigilar y "hackear".
El ambicioso proyecto MegaNet no usará direcciones IP sino nuevos protocolos de comunicación e intercambio de datos, explicó Dotcom en la conferencia de tecnología SydStart celebrada en Australia, según publica el periódico 'The Sydney Morning Herald'. El empresario conversó con los participantes del evento a través de videoconferencia desde Nueva Zelanda, donde espera la decisión judicial sobre su extradición a EE.UU. por el caso Megaupload.
"Si no hay dirección IP, no se puede 'hackear' el servidor ni realizar ataques de denegación de servicios. Lo más importante es que se hará difícil que los Gobiernos violen nuestra intimidad. La red que estoy elaborando está totalmente encriptada", detalló Kim Dotcom, y aseguró que la tecnología de encriptación será "tan poderosa que ningún superordenador será capaz de descifrarla".
El sistema se basará en la potencia de los 'smartphones' y ordenadores portátiles. Según calcula, si se unen unos 100 teléfonos móviles inteligentes, la red dispondrá de más capacidad de almacenamiento, ancho de banda y poder de cálculo que los diez sitios web más grandes del mundo juntos. MegaNet funcionará a base de la llamada 'blockchain', o cadena de bloques (la misma que la red de bitcóin), que permite intercambiar datos mediante cifrado.
"En ese momento son solo mis palabras pero voy a demostrarlo cuando el servicio se ponga en marcha. Ya verán. Los que buscan seguridad evaluarán y validarán MegaNet",afirmó Dotcom. El empresario espera que 100 millones de usuarios se inscriban en la red el primer año de su funcionamiento, que está previsto para el año 2016.
 



Congresista Republicano ataca al Che en Miami

5 de Novembro de 2015, 17:11, por David Díaz Ríos

Congresista Republicano ataca al Che en Miami

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Edmundo García / (www.latardesemueve.com / @edmundogarcia65)
 
Marcelo Claure, presidente y jefe de operaciones ejecutivas de la compañía Sprint, que ha firmado un reciente acuerdo con ETECSA, estuvo de visita en La Habana. Como es común entre los visitantes que llegan a Cuba, sean amigos o no, Claure fue a la Plaza de la Revolución e hizo una foto de la imagen del Che que luego colgó en su twitter. Ese sencillo gesto fue el pretexto para que esta semana enMiami se desatara sobre el empresario una campaña de acoso, en la que participaron hasta congresistas federales encabezados por el Republicano Carlos Curbelo, actual titular del Distrito 26 de la Florida, que abarca los cayos (condado Monroe) y el sur del condado Miami Dade.
Curbelo, que es de origen cubano, utilizó su ataque a Claure para lanzar una andanada de ofensas al Che, una figura que le queda demasiado grande. Este artículo, como respuesta, va dirigido a ese congresista de Miami:
Mira Curbelo… Tú no conoces al Che; tú no sabes quién es el Che. Tu familia parece que no ha tenido capacidad mental para entender al Che y enseñártelo en su verdad; y tú es obvio que no la tienes para haberlo entendido por tu cuenta.
Tus descendientes no van a entender al Che. O a lo mejor sí. Ojalá que sí. El Che era una persona con una capacidad de valor como pocas la han tenido; y con unas convicciones en consecuencia con ese valor.
El Che era argentino, era de toda América Latina y de todo el universo. El Che fue un hombre que desde su juventud formó parte de los movimientos guerrilleros más importantes de su época.
El Che fue un revolucionario en varios contenientes. Recorrió Nuestra América y conoció de primera mano los problemas de la gente. Era un médico y un revolucionario y en esa doble condición se puso al servicio de los más necesitados. Luchó en Guatemala, donde se opuso al golpe preparado por los halcones de la CIA contra Velazco Alvarado; luchó en Cuba, en el Congo, en Bolivia. Donde quiera que hiciera falta, en cualquier lugar que conoció una injusticia allí estuvo el Che.
Como debieras saber Curbelo, el Che fue asesinado vilmente en Bolivia por un personaje que vive actualmente en Miami; o con la complicidad de ese personaje, llamado Félix Ismael Rodríguez Mendigutía, a quien apodan “el gato”. No importa que haya disparado otro, “el gato” estaba allí para asegurarse de que lo masacraran cobardemente. No te creas ninguna otra leyenda, ninguna otra mentira.
Seguramente tú conoces a ese asesino, porque es de las personas que tú tratas de ganarte con difamaciones como las que recientemente has proferido, para que voten por tu reelección. Se te olvidó muy pronto lo que una vez dijiste de la honestidad y el respeto a la verdad cuando eras miembro de la junta escolar de Miami. Pero a ti el magisterio no te pega, no te gusta. Donde tú te sientes bien es en ese tipo de política que se vuelve corrupta y se alimenta de lo inmoral.
Porque tú no haces política buena para los ciudadanos Curbelo, tú haces política contra Cuba, te alimentas de los ataques al país de tus padres.
En Che era una persona que nunca aceptó un privilegio. ¡Qué no hubiera podido tener el Che! ¡Qué no se habría ganado ya el Che con su valor y su ejemplaridad! Yo estoy seguro que ese carguito que tú tienes como congresista federal tú lo defiendes hasta con las uñas, hasta con las cutículas; si tienes que clavar las uñas para mantenerte en el puesto las clavas; y si tienes que pintártelas, te las pintas Curbelo. Las de las manos y las de los pies.
Para hablar de una figura como el Che tienes que aprender muchas cosas primero. No hablar desde la ignorancia; porque es desde la ignorancia que tú lo has atacado con mucho odio. Porque cuando uno ni siquiera conoce a quien ataca es muestra de que lo hace por odio inculcado o porque se presta para transmitir pensamientos o sentimientos de otros. En tu caso seguramente que de Ileana Ros-Lehtinen y de Mario Díaz-Balart, que llevan más tiempo que tú en el congreso. O de David Rivera, a quien seguramente seguirás con tus pasos.
Mira Curbelo, cuando al Che le rozaban las balas seguía adelante sin importarle el peligro; con quince hombres bajo su mando el Che ponía en jaque a una columna de cientos de enemigos. Lo hacía de frente. Y además los rendía, por táctica y estrategia. En la guerra abierta y en la guerrilla el Che era capaz de resistir días enteros sin comer, y atendía a sus hombres cuando enfermaban o eran heridos, antes que a sí mismo. El Che sufrió varias heridas y jamás se quejó.
Yo estoy convencido congresista Curbelo, que si usted ve una escopeta de “perles”, de copita, que si usted escucha el ligero silbido de una “balita U”, yo estoy seguro que usted sale volando. Quiero decir corriendo… No, volando: usted sale volando del miedo y habrá que seguirlo por la huella de lo que vaya soltando por el camino. Sea el producto que sea el que se desprenda del cuerpecito suyo.
Usted es incapaz de enfrentar la vida como la enfrentó el Che Guevara. Desde el punto de vista icónico, sin que con esto quiera comparar sus vidas, el Che es hoy una figura comparable a las grandes leyendas del siglo XX y que acompañan nuestro tiempo; pienso, por ejemplo, en John Lennon.
Yo no sé si usted entiende esto Curbelo; pero limpie su tren de aterrizaje cuando use la boca para hablar del Che. Usted es víctima de todas esas leyendas  y mentiras que andan por Miami. Déjeme aclararle que el Che jamás abatió a una persona indefensa. El Che enfrentó enemigos, eso sí; a mercenarios pagados por potencias extranjeras para que atentaran contra su pueblo.
Ya quisieras encontrarte tú en el lugar que el Che se perdiera. El Che era guapo Curbelo; pregúntales a tus padres lo que es ser guapo. Si tú hubieras estado en uno de los escuadrones de los esbirros que tú admiras, el Che solo Curbelo, con el Capitán San Luis y El Vaquerito al lado, déjame decirte, que te caminaba pa’rriba, pa’rriba Curbelo y los rendían a pura letra “C”.
Mira Curbelo, del Che hablan muchos; pero hablar ofensivamente, en lo personal, como tú has hecho, requiere otras cosas. Para que lo sepas.
 
Publicado por: David Díaz Ríos
 

 



Por qué desean Internet en Cuba

5 de Novembro de 2015, 14:49, por David Díaz Ríos

Por qué desean Internet en Cuba

Aboga Cuba en ONU por gobernanza democrática de Internet
 
Por Arthur González En días recientes, el subsecretario adjunto para el Hemisferio Occidental, Alex Lee, destacó “la importancia que Obama ha puesto en las telecomunicaciones en Cuba desde que empezaron los acercamientos con el Gobierno de Raúl Castro, en diciembre del año pasado”.
¿Cuáles pueden ser las razones para que después de mantener un férreo Bloqueo a Cuba, con el fin de que no accediera a las facilidades de Internet, ahora el presidente de Estados Unidos se proponga como meta que el presidente Raúl Castro establezca Internet para todos los ciudadanos?
El bloqueo impuesto por Estados Unidos a Cuba durante más de cinco décadas causa serios daños al sector de las comunicaciones y la informática.
Nadie duda que la Isla es uno de los pocos países del mundo que no tiene las facilidades de acceso pleno a Internet, pero no se puede olvidar que producto del Bloqueo Económico, Comercial y Financiero impuesto por Estados Unidos hace más de medio siglo, Cuba está impedida de utilizar los cables submarinos yanquis que pasan muy cerca de su plataforma insular, ni es posible navegar por muchos sitios precisamente por el llamado eufemísticamente “Embargo”.
El obstáculo no es el gobierno cubano, sino el estadounidense que impide adquirir tecnologías de punta, prohíbe facturar en dólares y prohíbe ejecutar transacciones bancarias con sanciones multimillonarias, a los que se atrevan a desafiar el “embargo”.
El subsecretario adjunto para el Hemisferio Occidental expresó que “el servicio de Internet es demasiado caro para el cubano promedio y es estamos tratando de crear incentivos para que el Gobierno cubano reconsidere su política frente al Internet”.
Alex Lee olvidó explicar la verdad del interés que tiene Estados Unidos en la utilización de Internet, que no es precisamente para ayudar al desarrollo de Cuba, todo lo contrario, pretenden usarlo como un arma para subvertir el sistema socialista y especialmente dirigido a la juventud.
Algunos antecedentes esclarecen el actual interés de Obama.
En 1996 la RAND Corporation, del Instituto de Investigaciones para la Defensa Nacional de Estados Unidos, preparó un estudio para el Departamento de Defensa, titulado “Las telecomunicaciones cubanas, las redes de computación y sus implicaciones en la política de Estados Unidos”, presentado durante un evento celebrado en Miami en el mes de agosto de ese año.
El estudio pretendía “ayudar a la apertura en Cuba y forzar el surgimiento de una sociedad civil independiente” y entre sus objetivos estaban:
“Alentar el enlace de Cuba a Internet, utilizar Internet para transmitir noticias y análisis balanceados, promover el uso de Internet por ONG cubanas, universidades y otros destinatarios”.
En el año 1996 el presidente William Clinton, ordenó a la USAID iniciar un programa hacia Cuba, al que denominaron “Proyecto Cuba”.
Desde ese momento fueron introducidos en el país más de 25 mil radios de onda corta para la recepción de las estaciones de radios ubicadas en Estados Unidos, mediante el empleo de la valija diplomática de la Sección de Intereses en la Habana, en franca violación de la Convención de Viena de 1961.
En marzo del 2005, Roger Noriega, Subsecretario de Estado para el Hemisferio Occidental, afirmó en una audiencia congresional:
“Estados Unidos flexibilizó los requisitos de las licencias para que, por primera vez, puedan ser entregadas computadoras personales de alta velocidad, a grupos de la sociedad civil en Cuba”.
Entre los años 2004 y 2006, la USAID repartió cerca de 35 millones dólares para proyectos subversivos contra Cuba, muchos de ellos vinculados directamente al tema de la informática y las comunicaciones.
Durante la Asamblea de la USAID con diferentes ONG, celebrada en Washington el mes de mayo 2008, el director de la USAID para América Latina, José Cárdenas, explicó la necesidad de introducir en la Isla celulares, equipos modernos de comunicación, computación y software, lo que fue respaldado por el jefe del Buró de Industria y Seguridad del Departamento de Estado, Anthony Christino III.
La aprobación de esas medidas dio inicio a una carrera para atraer a la juventud cubana hacia sus proyectos subversivos, a través de Internet, con el propósito de promover desórdenes sociales al estilo de las llamadas “Revoluciones de Colores”.
En evento celebrado en 2012 por la Fundación Heritage de Estados Unidos y Googles Ideas, se elaboró un informe para el Gobierno norteamericano, recomendándole la creación de una red WIFI remota para posibilitar el acceso a Internet de los cubanos.
El Senador Marco Rubio, participante en el mismo, aseguró que:
“El sistema totalitario cubano podría derrumbarse, si todos los cubanos tuvieran libre acceso a Internet, pues Cuba seguiría la misma suerte de aquellos países que pasaron la Primavera Árabe”.
Otros participantes expresaron:
“Deben aprovecharse las experiencias de la primavera árabe, enviar a Cuba información a través de los teléfonos inteligentes, USB, mensajería de texto y crear un fondo de defensa ciberactivistas para apoyar financieramente a los cubanos”.
Posteriormente, la USAID inició el diseño de un software especialmente para Cuba, bautizado con el nombre de Zunzuneo, en el cual se conforma un Twitter para enviar mensajes a los jóvenes a través de las redes sociales y otros mecanismos digitales, con la pretensión de exhortarlos a movilizarse contra el Gobierno.
El 13 de junio del 2013 el Departamento de Estado anunció propuestas de varios proyectos para promover la “democracia y los derechos humanos” en Cuba, uno de ellos con el uso de herramientas digitales “para ser utilizadas de forma selectiva y segura por la población civil cubana, junto con otra iniciativa para el fomento de igualdad y defensa de las redes sociales de los cubanos de raza negra”.
El portavoz de la Casa Blanca, Jim Carney, reconoció que: “El Congreso financia programas para la democracia en Cuba, con el interés de ayudar a empoderar a los cubanos a fin de que puedan acceder a más información y para fortalecer a la sociedad”.
Información publicada en el 2014 por el diario The New York Times, afirma que el Departamento de Estado proporcionó 2,8 millones de dólares a un equipo de hackers y activistas comunitarios especialistas en programación de software, para desarrollar un sistema de redes que permitiera a personas afines a los intereses de Washington, comunicarse por Internet sin interferencias de sus gobiernos.
Esa red fue probada con éxito en el 2011 en la ciudad de Sayada, en Túnez, iniciada por expertos informáticos tunecinos que estimularon las revueltas populares causantes del derrocamiento del Presidente Zine Al-Abidin Ben Ali.
El criterio de los periodistas del New York Times, es que el programa ejecutado en Túnez fue un ensayo antes de desplegarlo en zonas más disputadas, similares a las que financió la USAID para los programas de la Oficina de Iniciativa para la Transición, OTI, adscripta al Buró de Democracia, Conflictos y Ayuda Humanitaria de la USAID, para Cuba.
Matt Herrick, portavoz de la USAID, reconoció a The New York Times, que esa agencia entregó una subvención por tres años a la New America Foundation, ascendente a 4,3 millones para hacer la plataforma disponible en Cuba.
El software diseñado fue denominado “Commotion”, y consiste en una amplia conexión inalámbrica WIFI y fue diseñado para relacionar varios enrutadores WIFI en una red ilegal, sin autorización ni pago a los servicios a empresas de telecomunicaciones cubanas, con el marcado propósito de evadir su control.
El pretexto esgrimido para instalar en Cuba dicho programa, es “el prolongado compromiso del Gobierno estadounidense de facilitar las comunicaciones abiertas entre el pueblo cubano y el mundo externo”, algo que nadie le ha solicitado y es violatorio de las leyes internas de todos los países, incluido Estados Unidos.
Sascha Meinrath, uno de los fundadores del “Open Technology Institute at the New America”, declaró respecto al software “Commotion”:
“Es un proyecto ejecutado por su Instituto por iniciativa de la New America Foundation, con sede en Washington DC”.
A estos ataques cibernéticos debe sumarse el blog “Generación Y”, fabricado especialmente para Yoani Sánchez Cordero en el 2007 y traducido hoy a casi 19 idiomas, cuyo propósito es el de lograr la rebelión de la juventud cubana.
Unido a ello, está el diseño de servicios y plataformas personalizadas hacia los jóvenes cubanos, dirigidas a apoyar la estrategia de estimular la realización de manifestaciones públicas. Entre los más conocidos están: “Por el levantamiento popular en Cuba”, “Háblalo sin miedo”, “Martínoticias”, “Cuba sin censura”, “Cuballama” y “ZunZuneo”.
En la amplia estrategia anticubana con el empleo de Internet, se destaca su proyecto más reciente, el periódico digital “14ymedio”, diseñado para la propia Sánchez Cordero, durante su visita a Estados Unidos en abril del 2014 y anunció que su distribución en Cuba se basa en los teléfonos celulares, correos electrónicos, memorias USB flash drives, DVD y CD.
Ese mismo año, Yoani Sánchez recibió una beca de Yahoo en Valores Internacionales, Comunicación, Tecnología e Internet Global, en la Universidad de Georgetown, Washington, con una asignación de 60 mil dólares para cubrir costos académicos y alojamiento, más 5 mil dólares adicionales para gastos de viaje.
La Guerra Cibernética contra Cuba cuenta con la aprobación del Presidente Barack Obama, basada en el concepto señalado en el Plan de Transición, puesto en marcha bajo la presidencia de George W. Bush, donde se afirma:
“Llegar a la juventud cubana representa una de las oportunidades más significativas para precipitar el fin del régimen. Esta generación tiene el vínculo más débil con la Revolución, su apatía y descontento son endémicos. Continuar aislando al régimen castrista al mismo tiempo que se da apoyo a la oposición democrática y se potencia a la emergente sociedad civil”.
El 01.07.2015 al informar la apertura de embajadas Obama precisó:
“…podremos aumentar considerablemente nuestro contacto con el pueblo cubano”. “Tendremos más personal, y nuestros diplomáticos podrán participar de manera más extensa en toda la isla…incluida la sociedad civil y con los cubanos que buscan alcanzar una vida mejor”.
“…nadie espera que Cuba se transforme de la noche a la mañana, pero creo que el compromiso estadounidense, mediante nuestra embajada, empresas y ante todo nuestro pueblo, es la mejor manera de representar nuestros intereses, y apoyar la democracia y los derechos humanos”.
El 31.07.2015 Hillary Clinton argumentó algunas ideas de las razones para un cambio de política hacia la Habana, entre:
“Los cubanos quieren comprar nuestros productos, leer nuestros libros, navegar en nuestra Web y aprender de nuestra gente. Ellos quieren llevar su país al siglo XXI. Ese es el camino hacia la democracia y la dignidad, nosotros debemos caminar a su lado”.
“Como presidente aumentaré la influencia de Estados Unidos en Cuba, en vez de reducirla”.
Estos planes persiguen el sueño anhelado de provocar una rebelión popular en Cuba encabezada por la juventud, similar a las inducidas en países del Medio Oriente, con el objetivo de destruir a la Revolución desde adentro.
El Departamento de Defensa anunció el 29.10.2015 la implementación de la medida que retira a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo, respondiendo al llamado del presidente Barack Obama para normalizar las relaciones diplomáticas y comerciales con la isla.
Siguiendo los pasos de otras agencias federales, el Sistema de Regulación de Adquisiciones del Departamento de Defensa ha anulado las restricciones existentes sobre la compra de equipos por Cuba y elimina la cláusula 252.225-7049, que prohibía la adquisición de Servicios de Satélite Comercial de ciertas entidades extranjeras, y la 252.225-7050, que dicta la divulgación de la propiedad o el control por parte del Gobierno de un país que es un Estado patrocinador del terrorismo.
 
Todo está encaminado al empleo de Internet como un arma para lograr el cambio de sistema y no para ayudar el desarrollo económico y científico de Cuba, por eso José Martí afirmó:
 
“…hay pocas cosas que en el mundo sean tan odiadas como los hipócritas”.
 
Fuentes:
 
 
Publicado por: David Díaz Ríos



Inaugurada en la Uniss pintura mural dedicada a la Patria (+FOTOS)

4 de Novembro de 2015, 14:53, por David Díaz Ríos

Inaugurada en la Uniss pintura mural dedicada a la Patria (+FOTOS)

La Facultad de Ciencias Pedagógicas de la Universidad José Martí Pérez de Sancti Spiritus (Uniss), inauguró la pintura mural: “Ni una hora de descanso en la tarea de fomentar la Patria”.
La actividad contó con la presencia del Decano de la facultad DrC. David Santa María Cuesta, así como profesores y estudiantes. 
La obra aborda el tema de la historia de la educación cubana y su significado para la identidad nacional y fue realizada por alumnos de la carrera Licenciatura en Instructores de Arte (Orelvis Orestes Martínez, Liset Fardales, Jorge Félix Morales, Diecby Nasco, Daimara Manso, Ernesto López,   Yasmany Enebral, Yenni de la luz Caballero, Glenys Estrada)
El mural tiene tres elementos fundamentales:
1.-El fondo compuesto por la Bandera que identifica nuestra Patria como única y base de nuestras ideas.
2.-La Luz que irradia un farol, símbolo de la campaña de alfabetización  (1960-1961) y del conocimiento.
3.-Figura del maestro José Martí en representación de nuestra institución y el ideario pedagógico cubano.