Las diferencias de Berta Soler con la líder del grupo de 30 desgajado en Santiago de Cuba es la muestra más evidente del pugilato por el reparto de los verde$ entre las Damas.

Se equivoca quien piense o crea que con la última noticia en la palestra pública sobre las llamadas Damas del Cheque en Blanco, como magistralmente las bautizó un colega, ya llegó al colmo la copa de barbaridades recogidas en papel, audio o vídeo.

Sabido es que el grupo de despedaza entre los tira y jalas internos por la repartidera de dinero en pos de la mejor tajada; de las denuncias por corrupción que llueven sobre la anatomía (para ser más exactos, sobre las manos) de la diz que líder sin liderazgo Berta Solar (perdón, Soler); de las entrevistas que tienen a bien conceder a cuanto medio les pone cámara y micrófono delante, para desbarrar de su lidereza, una de las más activas "beneficiarias" de la agencia Disentur en aquello de granjearse viajes al exterior a diestra y siniestra, pero que a lo interno lo mismo convoca y embarca, que favorece a familiares y amigos cuando de repartir hasta becas se trata.

Personalmente yo era uno de los creídos, de quienes pensaba que después de los últimos escándalos con las Damas del Verde y el mercenarismo de alto vuelo de su "jefa", de su vocación autoritaria, no ya no habría espacio para el asombro y las sorpresas. Pero la más reciente experiencia me indujo a alertar del asunto y por eso la línea que encabeza el lead de este post.

Porque había visto y escuchado de todo, pero leer declaraciones de una dama en condición de anonimato a una periodista revolucionaria, cubana de las de la Cuba de Fidel, como suelen identificarnos los amigos a quienes aquí echamos pie en tierra por el proyecto social en marcha para desmarcarnos de esa otra fauna de mercenarios y anexionistas, le pone como decimos acá, la clásica tapa al pomo.

Tal es el sentimiento de frustración y desencanto que embarga a las mediáticas damiselas, en especial desde que la del Solar (perdón, la Soler), tomó las riendas del grupo. Pero bueno, no les alargo más la introducción. Sólo recomendarles de buena tinta el trabajo titulado Berta Soler: una experta del engaño, de la periodista Adie Sedarno, colaboradora de varias publicaciones, entre ellas del blog Guanaroca del Sur, de la colega Mercedes Caro, donde dí con el sorprendente hallazgo.

Nada, que como reza el viejo refrán, la vida (digo, las Damas) nos siguen dando sorpresas. Les sugiero sentarse, adoptar una postura cómoda y agarrarse bien de la butaca.

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Tomado de Fanal Cubano