Buscar la verdad, el papel de los medios progresistas
29 de Setembro de 2014, 22:18 - sem comentários aindaPor David Brooks, Corresponsal
La era digital no cambia la misión de la prensa libre
“Antes que nada, quisiera decir que es un privilegio y un placer poder sumarme, aun si es a distancia, a la celebración del 30 aniversario de La Jornada y sus notables logros a lo largo de estos años, una ilustración inspiradora de lo que puede ser un medio libre e independiente”
Noam Chomsky
La era digital no cambia en lo esencial la misión del periodismo comprometido e independiente, sobre todo en momentos en que se requiere de una ciudadanía consciente y comprometida para responder a los sistemas del poder que llevan al mundo al borde de un desastre apocalíptico, comentó Noam Chomsky en entrevista con La Jornada.
A pesar del sombrío panorama que pinta la coyuntura actual, Chomsky señala que algunos "rayos de luz" esperanzadores para el mundo provienen de los cambios históricos en América Latina.
Chomsky, el intelectual vivo más citado en el planeta y uno de los 10 más citados en la historia, es un feroz crítico del modelo neoliberal, de las políticas imperiales de Estados Unidos y de las de Israel contra el pueblo palestino, así como del uso y abuso de la comunicación y los medios.
En el ámbito académico, Chomsky no sólo es considerado el padre de la lingüística moderna, sino que el profesor emérito del Instituto Tecnológico de Massachusetts también se ha destacado por sus aportaciones a la filosofía y las ciencias sociales.
Profundamente convencido de que decir la verdad ante el poder es obligación moral, Chomsky desnuda al emperador todos los días y aún es, a sus 85 años de edad, uno de los pocos intelectuales confiables y respetados por las nuevas generaciones, a pesar de que está virtualmente vetado por los medios masivos tradicionales en este país y otros. Por tanto, es un hombre peligroso para el poder, y por eso sigue siendo una voz vital para el presente y el futuro.
Chomsky, colaborador de La Jornada durante varios años, ofreció sus reflexiones sobre aspectos de la coyuntura en una entrevista con motivo del aniversario de este periódico.
–¿Cómo percibe lo que algunos llaman "cambios revolucionarios" en el panorama de los medios al surgir el mundo digital, el cual, según argumentan algunos, prometió "democratizar" el periodismo y abrir una era de comunicación e información masiva? ¿Algo ha cambiado?
–Claro que hay cambios, pero creo que lo fundamental permanece igual. Internet indudablemente ofrece una oportunidad de acceso a una rica variedad de información y análisis, como la producción de este tipo de material, con mayor facilidad que antes. También ofrece oportunidades para la diversión, la distracción, la formación de cultos, el pensamiento descuidado, navegar sin propósito claro y mucho más. Una buena biblioteca puede ofrecer una oportunidad para que alguien se vuelva un biólogo creativo o un lector sensitivo de gran literatura, o para perder el tiempo. Depende de cómo uno escoge usar lo que está disponible. Los resultados [de la nueva era digital] son mixtos.
“Para organizadores y activistas, Internet ha sido una herramienta indispensable. Pero aquí se requiere también una nota de cautela. Uno de los observadores más astutos e informados del tumulto en el mundo árabe, Patrick Cockburn, escribe que durante los levantamientos de la primavera árabe, ‘miembros de la intelectualidad [frecuentemente] parecían vivir y pensar dentro de la cámara de ecos de Internet. Pocos expresaron ideas prácticas sobre cómo ir hacia delante’ o, podríamos agregar, prestaron suficiente atención a las realidades políticas, de clase o militares. Los resultados ahí están a la vista, y esas lecciones se pueden generalizar.
–¿Cuál debería ser el papel de los medios progresistas en este contexto?
–Todos permanecemos dependientes de los reportajes directos de periodistas valientes y honestos, los que hacen su labor con integridad. Ninguna tecnología va a cambiar eso. El papel de los medios progresistas es el mismo de siempre: intentar buscar la verdad en asuntos de importancia, romper el torrente de propaganda y engaño que está enraizado en los sistemas de poder y ofrecer los medios para que la gente pueda avanzar en las luchas por la libertad, la justicia y hasta la sobrevivencia frente a las amenazas ominosas.
–Usted persiste en abordar los efectos devastadores de las políticas del gobierno de Estados Unidos y del mundo empresarial, las cuales se manifiestan en guerras e injusticias sociales y económicas, y más recientemente advirtió que esto está llegando a un punto en el que estamos poniendo en riesgo la sobrevivencia misma de la civilización. Para aquellos que observan Estados Unidos y América Latina en este momento, ¿cuáles son los desafíos más básicos que se enfrentan hoy día? ¿Dónde percibe el potencial más grande para una respuesta ante esos desafíos?
–Las amenazas son muy reales. La amenaza de destrucción por guerra nuclear está siempre presente, y el historial es atemorizante. Lo mismo es cierto, tal vez aún con más prominencia, acerca de la amenaza de una catástrofe ambiental. Por primera vez en la historia humana estamos frente a las posibilidades de destruir las condiciones de una sobrevivencia decente, y los sistemas de poder nos están llevando a ese precipicio.
“Sin embargo, hay señales alentadoras, en gran medida desde América Latina, ya que lo que ha ocurrido en años recientes tiene un significado verdaderamente histórico. Por primera vez en 500 años, países de América Latina han dado pasos muy serios hacia la integración y la independencia del poder imperial extranjero (en el pasado siglo, principalmente Estados Unidos).
“Los cambios, que son espectaculares, se revelan de varias maneras. No hace mucho, América Latina era el ‘traspatio’ de Washington. Los países hacían lo que se les ordenaba, o, si se salían de esa línea, eran sometidos a golpes militares, terror asesino y destrucción. Pero ahora, en conferencias hemisféricas, Estados Unidos y Canadá están virtualmente aislados.
“Un estudio reciente de los programas de rendición extraordinaria de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), una de las formas más salvajes y cobardes de tortura, encontró que colaboró gran parte del mundo, incluida Europa, pero había una excepción: América Latina. Esto es doblemente notable: primero, por la subordinación histórica de la región a Washington, y segundo, porque durante ese periodo [de subordinación] la región era uno de los centros de tortura del mundo.
“Por otro lado, según el Tratado de Tlatelolco, América Latina es una de las pocas regiones del mundo con una zona libre de armas nucleares.
“En otro rubro, con comunidades indígenas frecuentemente como líderes, varios países latinoamericanos han dado pasos significativos hacia reconocer los derechos de la naturaleza y buscar economías sustentables que frenen la precipitación hacia un desastre ambiental.
“Todo esto es dramático y prometedor, aunque no sin fallas y problemas serios.
"Los retos que enfrentamos hoy son inmensos. El más grande potencial [para una respuesta] es una ciudadanía activa y comprometida. No hay mucho tiempo que perder."
–¿Qué lo hace reír hoy día?
–En la cultura judía en que crecí, hay un concepto de "risa a través de lágrimas". Lamentablemente, el mundo ofrece muchas oportunidades para esta práctica.
"Pero hay muchos rayos de luz, y amplias razones para esperar que un mundo mejor es posible, como el Foro Social Mundial y sus ramas nos recuerdan continuamente. Y no es accidental que sus raíces son latinoamericanas."
Publicado en Periódico La Jornada
FOTO Noam Chomsky durante una visita a la UACM, en septiembre de 2009 / Carlos Ramos Mamahua
Raúl Antonio Capote: Un espía de tercera generación
29 de Setembro de 2014, 16:13 - sem comentários aindaSer un líder de nuevo tipo en la transición cubana al capitalismo en el siglo XXI, era el papel deparado por la Agencia para su colaborador de nuevo tipo, un intelectual y no a un tradicional dirigente de la llamada oposición c/r, solo que ese fue el mismo destino que la contrainteligencia cubana pronosticó para su colaborador y espero pacientemente le confiaran los estadounidenses al entonces rebelde dirigente de los jóvenes creadores, Raúl Antonio Capote, su agente Daniel, quien jugó un papel importante para neutralizar los planes de desencadenar la subversión general en el país en el difícil verano del 2006 .
Tomado de Cuba es surtidor, blog del autor, periodista cubano
FOTO RCBáez Capote se dirige a jóvenes universitarios en el #BlogazoXCuba
La santa cruzada de Barack Obama
29 de Setembro de 2014, 0:08 - sem comentários aindaPor Manlio Dinucci*
La alocución televisiva del presidente Obama anunciando la creación de una coalición mundial contra una organización terrorista alcanzó su objetivo: la opinión pública occidental parece convencida de que esta guerra es una respuesta a la limpieza étnica en Irak. Sin embargo, tanto esa organización terrorista como la coalición reunida para luchar contra ella son peones de un plan de «rediseño del Medio Oriente ampliado» trazado hace 13 años. La única novedad es que Washington ha contratado un ejército privado para que se encargue de la limpieza étnica, condenada por el derecho internacional.
«Que Dios bendiga a nuestros soldados. Que Dios bendiga a los Estados Unidos de América.». Con esas palabras (invitamos al papa Francisco a que las comente) termina la solemne «Declaración sobre el EIIS» [1] con la que el presidente Barack Obama, revistiendo su casaca de «comandante en jefe», se dirigió el miércoles 10 de septiembre de 2014 no solamente a sus conciudadanos sino al mundo entero [2].
«América», explica Obama, está «bendita» porque asume las tareas más difíciles, empezando por la «responsabilidad de ejercer el liderazgo». En «un mundo incierto» como nuestro mundo actual, «el liderazgo estadounidense es la única constante». En efecto, es «América» la que tiene «la capacidad y la voluntad de movilizar al mundo contra los terroristas», es «América» la que «ha reunido al mundo contra la agresión rusa», es «América» la que puede «contener y eliminar la epidemia de ébola».
En un tono que recuerda el de un predicador medieval en la época de la peste –poniendo la «agresión rusa» en el mismo plano que la epidemia de ébola–, el presidente de Estados Unidos proclama la nueva cruzada contra el «Estado Islámico de Irak y de Siria» (EIIS), advirtiendo que «se necesitará tiempo para erradicar un cáncer como este». A pesar de todo lo que Estados Unidos ha hecho hasta ahora para combatir el terrorismo, subraya Obama, «continuamos enfrentando una amenaza terrorista» porque «no podemos borrar del mundo todo rastro del Mal».
Con esta advertencia, que recuerda las cruzadas del republicano Ronald Reagan contra «el Imperio del Mal» (la URSS) y del también republicano George W. Bush contra «el enemigo en algún oscuro rincón de la Tierra» (al-Qaeda), el demócrata Obama nos anuncia «la estrategia de Estados Unidos para vencer el EIIS», estrategia que consta de 4 puntos:
- «Una campaña sistemática de ataques aéreos contra el EIIS», en Siria y en Irak.
- «Creciente apoyo a las fuerzas que combaten al EIIS en el terreno»: con la diferencia, en relación con las anteriores intervenciones en Irak y Afganistán, de que Estados Unidos no enviará oficialmente fuerzas terrestres sino consejeros e instructores (otros 475 llegarán próximamente a Irak). También se aportará financiamiento y armamento, gracias a la adopción en el Congreso de una ley ad hoc, a las fuerzas iraquíes y kurdas y, en Siria, a los grupos que combaten contra «el régimen de Assad que aterroriza a su pueblo» y contra «los extremistas como el EIIS».
- «Seguir aprovechando nuestras considerables capacidades en materia de antiterrorismo para prevenir los ataques del EIIS», lo cual se logrará trabajando en estrecho contacto con los socios –entre ellos Israel, que ya se declaró dispuesto a compartir la información que han recogido sus propios servicios de inteligencia.
- «Prestar asistencia humanitaria a los civiles inocentes expulsados de sus hogares por» el EIIS.
Estados Unidos ya ha conformado «una amplia coalición de socios» que aportan «miles de millones de dólares en ayuda humanitaria, armas y respaldo a las fuerzas de seguridad iraquíes y a la oposición siria». En los próximos días el secretario de Estado John Kerry viajará al Medio Oriente y Europa para «reclutar más socios para esta lucha».
Lo que anunció la administración Obama no es una estrategia que el presidente ha tenido que autorizar después de haber subestimado la amenaza del Emirato Islámico –según la versión que tanto se han empeñado en divulgar los medios de prensa– sino una estrategia trazada desde hace años.
Como ya se ha documentado ampliamente, los primeros focos del futuro Emirato Islámico se formaron cuando, para derrocar a Kadhafi en Libia –en 2011–, la OTAN –bajo las órdenes de Estados Unidos– financia y arma grupos yihadistas que poco antes eran considerados terroristas. Después de haber ayudado a derrocar a Kadhafi esos yihadistas se trasladan a Siria para derrocar a Assad. Y es en Siria, en 2013, donde nace el Emirato Islámico, al que se le facilita el paso a través de Arabia Saudita, Qatar, Kuwait, Turquía y Jordania, que también le suministran armas y financiamiento, en el marco de un amplio programa coordinado por la CIA (la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos).
En mayo de 2013, un mes después de haber fundado el Emirato Islámico en Irak y el Levante, Ibrahim al-Badri –el hoy «califa» que se identifica con el nombre de guerra de Abu Bakr al-Baghadi– se reúne en Siria con el senador estadounidense John McCain, a quien Obama ha asignado la tarea de realizar operaciones secretas por cuenta del gobierno estadounidense. Después de esa reunión, el Emirato Islámico [entonces identificado como EIIL] emprende su ofensiva en Irak, en el preciso momento en que el gobierno del primer ministro al-Maliki está distanciándose de Washington para acercarse a China y Rusia.
El verdadero objetivo de la estrategia que ha emprendido Obama es la destrucción de Siria y la reocupación de Irak. Por otro lado, al implicar a sus aliados europeos en un nuevo frente en el Medio Oriente, y al mismo tiempo en el frente oriental contra Rusia, Estados Unidos refuerza su propia influencia sobre la Unión Europea, cuya unidad Washington desea únicamente si se mantiene bajo el liderazgo estadounidense.
Fuente
Il Manifesto (Italia)
*Geógrafo y politólogo
Tomado de Red Voltaire
Imágenes:
1 Fotomontaje agregado RCBáez
2 John McCain se reúne en Siria con el Estado Mayor del Ejército Sirio Libre (ESL). A la izquierda, en primer plano, Ibrahim al-Badri (el hoy autoproclamado “califa” Ibrahim) escucha al senador, quien habla diractamente al futuro “califa”. El individuo con espejuelos es el general Salim Idriss, jefe del ESL.
Escaramuzas Políticas: Arranca Obama nueva carrera armamentista nuclear
28 de Setembro de 2014, 17:56 - sem comentários aindaPor Gloria Analco, @GloriaAnalco *
La idea tan explotada en el cine, de una hecatombe nuclear donde después reina la desolación, que fue fruto de la Guerra Fría entre Estados Unidos y la antigua Unión Soviética, ha comenzado a penetrar en el público de nuevo y con mayor fuerza por causa de un amplio dossier que acaba de difundir The New York Times.
La información, que se había mantenido celosamente oculta, es aterradora, pone los pelos de punta y parece sacada de una película de Stanley Kubrick, donde el “Dr. Strangelove” presenta a unos militares alucinados que provocan la guerra nuclear.
Esos personajes existen, son de carne y hueso, y parece no preocuparles la aniquilación de la Humanidad.
“La administración Obama está invirtiendo decenas de miles de millones de dólares en la modernización y reconstrucción del arsenal nuclear y de las instalaciones estadounidenses”, afirma The New York Times.
El plan es renovar y modernizar a gran escala el programa atómico militar de Estados Unidos, para lo cual la administración Obama construyó en Kansas City una instalación más grande que el Pentágono, donde hay ocho grandes instalaciones y laboratorios con 40 mil especialistas en tecnología futurista, quienes están poniendo al día las armas nucleares.
El diario neoyorquino da a conocer que el gobierno estadounidense planea invertir un billón de dólares en las próximas tres décadas en su programa atómico. Además, en Nuevo México construye una instalación para la producción de plutonio para las ojivas nucleares, y en Tennessee, otra para producir uranio enriquecido para uso militar.
El programa comprende la compra de 12 nuevos submarinos, 100 bombarderos y 400 misiles lanzados desde tierra. En total son 57 proyectos de modernización nuclear presentados por Obama, de los cuales ya le aprobaron 21. El costo de 10 años está estimado en 335 mil millones de dólares. El dinero, ya sabemos, sale de los contribuyentes estadounidenses y enriquece extraordinariamente a las firmas privadas que participan en el programa.
No puede afirmarse, definitivamente, que concebir tales planes sea para mayor gloria de Estados Unidos, ni que con ello van a alcanzar la supremacía mundial permanentemente, o que si lo logran vayan a gobernar a un mundo en un lecho de rosas. Temeraria es, sin duda, su fanática visión del mundo.
Fidel Castro, al tanto de estos desatinos, escribió el pasado primero de septiembre que “si hoy resulta posible prolongar la vida, la salud y el tiempo útil de las personas, si es perfectamente posible planificar el desarrollo de la población en virtud de la productividad creciente, la cultura y desarrollo de los valores humanos ¿qué esperan para hacerlo?” Y también se pregunta si “triunfarán las ideas justas o triunfará el desastre”.
Si Estados Unidos logra salir adelante con sus planes sin oposición, ya podemos esperar la hecatombe nuclear y fulminada, además, la posibilidad de que ese país tan pretencioso gane la guerra. China y Rusia están ahora obligadas a potenciar su propio arsenal nuclear.
*Reportera mexicana, publica en Uno más uno y otros órganos de prensa. Colaboradora habitual de Cuba coraje. Trabajo enviado por su autora
Tomado de Entre semana, México
Imagen agregada RCBáez
Canciller cubano: La ONU requiere profunda reforma y la defensa de sus principios
28 de Setembro de 2014, 16:42 - sem comentários aindaIntervención del ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, en el Debate General del 69 Período de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
El canciller cubano instó a un cambio en la ONU y a un nuevo orden mundial mas justo y equilibrado. Foto: Reuters.
Señor Presidente:
Señor Secretario General:
Excelentísimos Señores Jefes de Estado y Gobierno:
Excelencias:
Distinguidas delegadas y delegados:
Vivimos en un mundo globalizado que avanza hacia la multipolaridad en una época marcada por la amenaza a la supervivencia de la especie humana.
El gobierno de los Estados Unidos y la OTAN no podrán revertir esa tendencia mediante un nuevo reparto del mundo por la fuerza de las armas, pero hay un serio riesgo de que, intentándolo, lo hagan ingobernable.
Los enormes arsenales nucleares y convencionales acumulados, el gasto militar anual impuesto de un billón, 750 mil millones de dólares, y el incremento al 2% del PIB de los presupuestos bélicos reclamado a todos los países de la OTAN, no servirán para enfrentar ni resolver los problemas de la pobreza, el hambre, las epidemias, las oleadas migratorias ni para conjurar las crisis de la economía global, ambiental, alimentaria, energética, hídrica.
Como ya se ha demostrado, donde apliquen la llamada “Guerra No Convencional”, descrita en la Circular de Entrenamiento 18-01 de las Fuerzas de Operaciones Especiales, y las novedades de la Revisión Cuadrienal de la Estrategia de Defensa de Estados Unidos, ambas de 2010, se impondrá el caos, mediante la desestabilización o destrucción de los Estados; la proliferación de grupos violentos y extremistas; el desgarramiento de las naciones, las culturas y las religiones, de lo cual surgirán graves peligros para la paz y la seguridad regional e internacional.
Es necesario rechazar la militarización del ciberespacio, la intervención ilegal y encubierta de los sistemas informáticos de unos países para utilizarlos en actos agresivos contra terceros, con el fin de alentar conflictos; así como el espionaje global a gobiernos y sociedades enteras.
La aplicación extraterritorial de las leyes de los Estados Unidos, en detrimento de otras naciones soberanas, es cada día más agresiva, y prolifera el empleo de sanciones unilaterales, en especial financieras, como instrumento de política exterior. La utilización de sus Cortes de Justicia para imponer multas multimillonarias, incluso a sus aliados, mediante fallos violatorios del Derecho Internacional, se ha convertido en instrumento de castigo, de amenaza y de obtención espuria de recursos financieros.
Si los gobiernos declinaran la defensa de su soberanía y la aplicación de sus propias leyes en protección de las normas del sistema financiero internacional, de los legítimos intereses nacionales y los de sus compañías y ciudadanos, estarían creando condiciones para el incremento de esas prácticas que ponen en peligro la independencia de todos los Estados y el imperio del Derecho Internacional.
Los emporios mediáticos, cada vez más vinculados con los objetivos hegemónicos de las potencias occidentales, prosiguen sus campañas de desinformación, manipulan los hechos de manera desvergonzada y cínica, y crean matrices de opinión pública que favorecen la agresión.
Es necesario otro orden internacional, sin lugar para la filosofía de la guerra y del saqueo de recursos naturales.
La intervención extranjera en Siria debe cesar. No es posible que potencias occidentales alienten, financien y armen grupos terroristas para lanzarlos contra un Estado mientras intentan combatir sus crímenes en otro, como ahora ocurre en Iraq.
El gobierno de los Estados Unidos quebranta el Derecho Internacional cuando lanza, al margen de la Organización de las Naciones Unidas, bombardeos unilaterales, sin respetar fronteras ni Estados soberanos, aunque las disimule con dudosas coaliciones.
El intento de desplegar la OTAN hasta las fronteras de Rusia tendrá graves consecuencias para la paz y la seguridad internacionales y para la estabilidad de Europa. Las sanciones contra Rusia son inmorales e injustas.
El despliegue estratégico norteamericano en Asia-Pacífico creará peligros para la soberanía de todas las naciones del área.
Los crímenes de Israel contra el pueblo palestino, más recientemente en la Franja de Gaza, no deben quedar impunes al amparo del veto en el Consejo de Seguridad. Palestina debe ser ya un Estado miembro de las Naciones Unidas, que ha de ser establecido dentro de las fronteras de 1967 y con capital en Jerusalem Oriental.
La Asamblea General ha de ejercer las prerrogativas que le concede la Carta, en la peligrosa e inestable situación internacional actual, llena de amenazas y desafíos. El Consejo de Seguridad debiera ser reconstruido sobre bases de democracia, transparencia, justa representatividad de los discriminados países del Sur como Miembros Permanentes y No Permanentes, credibilidad, estricto respeto a la Carta de Naciones Unidas; sin dobles raseros, procedimientos oscuros ni anacrónico veto. La Organización de Naciones Unidas requiere profunda reforma y la defensa de sus principios. El Secretario General debe ser defensor y garante de la paz y la seguridad internacionales.
Señor Presidente:
Los 1 200 millones de personas que viven en la pobreza extrema, los 842 millones que sufren hambre crónica, los 774 millones de adultos analfabetos y los 57 millones de niñas y niños no escolarizados nos confirman que las Metas de Desarrollo del Milenio, cuestionables metodológicamente, fueron un espejismo.
Ha faltado y falta voluntad política en los gobiernos de los Estados industrializados donde prevalece un ciego e ineficaz egoísmo. Voraces emporios trasnacionales concentran crecientemente la propiedad sobre enormes recursos. La desigualdad en la distribución de la riqueza es cada vez más brutal. Es necesario, ineludiblemente, un nuevo orden económico internacional.
En estas circunstancias, la concertación de la Agenda de Desarrollo Posterior al 2015 difícilmente pueda ser una esperanza. No obstante, hay que intentarlo como la tarea más perentoria. Debe ser el resultado de una negociación intergubernamental e inclusiva. El documento resultante no debe ser la interpretación por parte de algunos del consenso, sino el consenso mismo.
Es urgente poner la prioridad en África Subsahariana. Es preciso enfrentar, de manera conjunta y decidida, con cooperación suficiente y genuina, la epidemia de ébola que afecta a algunos países del continente.
Cuba decidió mantener su cooperación médica en los 32 países africanos donde laboran más de 4 mil especialistas, y extenderla, bajo la conducción de la Organización Mundial de la Salud, a los otros países más afectados, como ha sido informado. Nuestros médicos y paramédicos lo harán de forma voluntaria.
Llamamos a la comunidad internacional, en particular a los países industrializados que cuentan con grandes medios, a responder con energía a la convocatoria de las Naciones Unidas y la OMS, que permita contar de inmediato con los recursos financieros, sanitarios y científicos para erradicar dicho flagelo e impedir que siga cobrando vidas humanas.
Deben aportarse también los recursos necesarios en apoyo de la Agenda 2063 de la Unión Africana, que fija la hoja de ruta para el desarrollo de esa región.
En estas cinco décadas, 325 mil trabajadores de la salud cubanos han asistido a 158 naciones del Sur, incluidos 39 países africanos, en los que laboraron 76 mil colaboradores. También, se formaron gratuitamente 38 mil médicos, de 121 países, de estos, 3 392 de 45 naciones africanas. Si Cuba, pequeña y bloqueada, ha podido, ¿cuánto más no podría hacerse a favor de África con la cooperación de todos, en particular de los Estados más ricos?
Señor Presidente:
En la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, en La Habana, convinimos en que, para alcanzar el objetivo de sociedades más justas e inclusivas, es imprescindible una mejor distribución de la riqueza y los ingresos, la erradicación del analfabetismo, una educación de calidad para todos, el establecimiento de una verdadera seguridad alimentaria y sistemas de salud de cobertura universal, entre otros derechos humanos.
La solemne Proclamación de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, rubricada por los Jefes de Estado y Gobierno, consagra el respeto de los principios y normas del Derecho Internacional; la promoción de una cultura de paz, del desarme nuclear y del desarme general y completo; así como el derecho inalienable de todo Estado a elegir su sistema político, económico y social.
Asumimos también el compromiso de lograr que América Latina y el Caribe sea un territorio libre de colonialismo y apoyamos el derecho inalienable del pueblo de Puerto Rico a la autodeterminación e independencia.
La Cumbre de La Habana reconoció que las crisis económica, financiera y medioambiental actuales, golpean con especial crudeza a los pequeños estados insulares en desarrollo, entre ellos a las naciones del Caribe. Sus esfuerzos por elevar el bienestar de sus poblaciones no deberían ser castigados, calificándolos de países de renta media mediante el cálculo esquemático de los ingresos per cápita, sin tener en cuenta sus particularidades y vulnerabilidades.
En la CELAC, la región de América Latina y el Caribe ha encontrado un espacio autóctono y legítimo donde forjar, desde su rica diversidad, la imprescindible unidad para realizar los sueños de los Próceres de alcanzar la definitiva independencia de “Nuestra América” y hacer una contribución sustancial al “equilibrio del mundo”.
En ese empeño, han sido acontecimientos relevantes el encuentro BRICS-UNASUR, la reunión de líderes de China y los países de América Latina y el Caribe y la constitución del Foro CELAC-China en Brasilia, el pasado julio, como se había acordado en La Habana.
Saludamos la Declaración de Fortaleza, adoptada también en ese momento, en Brasil, en la VI Cumbre de BRICS, cuyas economías constituyen el 25 % del PIB mundial y representan casi el 40% de la población del planeta, así como la constitución del Banco de Desarrollo y de un Fondo Común de Reservas de Divisas, que son trascendentes para los países del Sur y para la construcción de una nueva arquitectura financiera internacional.
Expresamos toda nuestra solidaridad con la Revolución Bolivariana y Chavista que lucha y se defiende de acciones desestabilizadoras y de la injerencia externa bajo la conducción del Presidente Nicolás Maduro.
Respaldamos la digna batalla que libra Argentina frente a los fondos especulativos y nos oponemos a las decisiones injerencistas y violatorias del Derecho Internacional de Cortes estadounidenses. Igualmente, reiteramos nuestro firme apoyo a los legítimos derechos de Argentina sobre las Islas Malvinas.
Reitero nuestro apoyo invariable a la lucha que lleva adelante Ecuador frente a la expoliación y el daño ecológico provocado por la actividad de las trasnacionales.
En vísperas del Decenio Internacional de los Afrodescendientes (2015-2024), recordamos que este año se celebra el 210 aniversario de la independencia de Haití, cuya Revolución antiesclavista e independentista fue precursora de los movimientos libertarios en la América Latina y el Caribe. Haití merece una contribución especial para su reconstrucción y desarrollo, bajo la conducción soberana de su gobierno, para la que alentamos a la comunidad internacional. Apoyamos el reclamo del Caribe de recibir reparaciones de las potencias coloniales por los horrores de la esclavitud.
Señor Presidente:
El Departamento de Estado ha vuelto a incluir a Cuba en su lista unilateral y arbitraria de Estados patrocinadores del terrorismo internacional. Su verdadero propósito es endurecer la persecución de nuestras transacciones financieras internacionales en todo el mundo y justificar la política de bloqueo.
Durante el actual gobierno, se ha producido un recrudecimiento sin precedentes del carácter extraterritorial del bloqueo, con un marcado e inédito énfasis en el ámbito financiero, mediante multimillonarias multas a entidades bancarias de terceros países. Tal es el caso de la escandalosa e injusta mega-multa impuesta al banco francés BNP Paribas.
Tampoco desiste de promover la desestabilización en Cuba, destina cada año presupuestos millonarios y se apoya de forma creciente en el uso de métodos encubiertos, incluyendo las tecnologías de la información y las comunicaciones.
El proyecto ZunZuneo, de la USAID, que no solo viola las leyes cubanas, sino también las de su país, es la evidencia más reciente.
Las últimas revelaciones sobre el uso de jóvenes de nuestro continente en labores subversivas en Cuba, financiado y ejecutado por USAID, confirman las reiteradas denuncias del gobierno cubano sobre la continuidad de los planes ilegales para subvertir el orden interno, en violación de la soberanía cubana y de terceros países y del Derecho Internacional.
Es ineludible recordar que, en este mes, se cumplen 16 años de injusta prisión de tres cubanos del grupo de los Cinco –Gerardo, Ramón y Antonio–, quienes enfrentaron con sumo altruismo los planes terroristas que se organizan en territorio norteamericano contra nuestro país. Reitero, en nombre del pueblo y el gobierno de Cuba, que no descansaremos hasta lograr su regreso a la Patria.
Cuba, por su parte, se mantiene serena y dispuesta al diálogo mutuamente respetuoso, responsable, sobre bases recíprocas, con el gobierno de Estados Unidos.
Al mismo tiempo, avanza en el proceso de actualización de su modelo socio-económico, en medio de un escenario internacional adverso, marcado por la crisis económica global y el recrudecimiento del bloqueo.
La actualización del modelo socialista cubano está encaminada a asegurar bienestar, equidad y justicia social para todas las cubanas y cubanos. Los cambios que realizamos buscan preservar las conquistas de la Revolución, por las que tantas generaciones han luchado. Tienen como objetivo, la construcción de un socialismo cubano cada vez más justo, próspero y sostenible.
Muchas gracias.