Guantánamo y los héroes en la agenda de Obama
4 de Fevereiro de 2014, 2:46 - sem comentários ainda
Mientras que el presidente Obama reiteró en su reciente discurso que “este año se cerrará Guantánamo”, no dijo nada sobre los cuatro antiterroristas cubanos aún presos en EE.UU.
En su mensaje sobre el estado de la Unión, leído el pasado martes 28 ante el Congreso, el presidente Barack Obama anunció que “este año se cerrará definitivamente Guantánamo”, la prisión extraterritorial erigida por EE.UU. en la base naval que tiene en territorio cubano, donde alojó después de 2001 a los sospechosos por terrorismo islámico detenidos y secuestrados en distintas partes del mundo. Más allá de su buena voluntad, que depende del voto de un Congreso hostil, el presidente omitió manifestarse sobre los cuatro agentes antiterroristas cubanos presos en EE.UU. desde 1998.
René González, el primero y único integrante del grupo que ha sido puesto en libertad después de cumplir una condena de 15 años, sostuvo el viernes 24 un encuentro con la prensa internacional acreditada en La Habana para la cobertura de la Cumbre de la Celac. En la conferencia de prensa, el oficial de inteligencia denunció las irregularidades del juicio al que fueron sometidos en Miami y exigió la inmediata liberación de Gerardo Hernández, Antonio Guerrero, Ramón Labañino y Fernando González.
Dos semanas antes, el 13 de enero, se había anunciado que González participará junto con la escritora feminista norteamericana Alice Walker, el ex fiscal general de EE.UU. Ramsey Clark y otros invitados especiales en la Comisión Internacional de Investigación del caso de los Cinco Cubanos que se reunirá en Londres, en la Law Society, el 7 y 8 de marzo próximos. La sesión se realiza por iniciativa de la campaña internacional “Voces por los Cinco”. Estará acompañado por familiares de sus compañeros, otras víctimas del terrorismo contra Cuba, juristas, políticos y activistas procubanos. La Comisión escuchará testimonios de unos veinte testigos clave, como el abogado defensor de Los Cinco en EE.UU. Martin Garbus, representantes de Amnistía Internacional y familiares de Los Cinco, incluyendo a las esposas Olga Salanueva y Elizabeth Palmeiro. La Comisión estará presidida por un jurado internacional de gran prestigio jurídico.
La Comisión Internacional es el principal evento de la campaña internacional “Voces por los Cinco” que ha reunido a cientos de personalidades internacionales, como John Le Carré, Emma Thompson, Danny Glover, Lord Rowan Williams, Martin Sheen, Noam Chomsky, Günter Grass, Nadine Gordimer, Peter Capaldi y Dame Vivienne Westwood. A ellos se han sumado miles de personas que han enviado mensajes de apoyo al sitio web de la campaña. Una serie de otras actividades se llevarán a cabo durante el desarrollo de la Comisión Internacional, incluyendo un gran concierto internacional en el Barbican Hall de Londres con el músico cubano ex integrante del Buena Vista Social Club Eliades Ochoa junto a otros artistas e invitados internacionales, además de proyecciones de películas y exposiciones.
René González, Ramón Labañino, Gerardo Hernández, Antonio Guerrero y Fernando González fueron designados en 1996 por Cuba para infiltrarse en las redes terroristas anticastristas en Miami, conseguir información y evitar nuevos ataques. Los cinco no se conocían entre sí antes de la misión. Hubo un abordaje individual hacia cada uno de ellos, cuenta el piloto González, y se les planteó la necesidad del país de enterarse a tiempo de los planes de los grupos anticastristas.
El 12 de septiembre de 1998 René fue encarcelado junto a sus cuatro compatriotas por el FBI por el delito de espionaje en territorio norteamericano. Se les mantuvo en confinamiento por 17 meses y 48 días. El juicio se celebró en Miami. Su condena fue de 15 años de prisión por la acusación de ser agente extranjero no declarado. Como René tenía la ciudadanía norteamericana, porque nació en Chicago en 1956, el 7 de octubre de 2011 fue liberado de la cárcel de Marianna, Florida con la condición de permanecer en Estados Unidos bajo el régimen de libertad supervisada por tres años.
No obstante, en 2012 recibió un permiso para visitar Cuba por 15 días y ver a su hermano Roberto, quien había sido uno de los abogados de su defensa y agonizaba de cáncer. René regresó a EE.UU. para continuar cumpliendo su probatoria. En abril del 2013 solicitó y obtuvo otro permiso para visitar a su familia, tras el fallecimiento de su padre. Su abogado propuso entonces a la jueza Joan Lenard que René se quedara en Cuba, a cambio de renunciar a su ciudadanía norteamericana. La propuesta fue aceptada y el 11 de mayo de 2013 René González se quedó en Cuba luego de renunciar a su ciudadanía norteamericana. Sin embargo, ha declarado que, mientras sus cuatro compañeros continúen en prisiones norteamericanas, él se seguirá considerando prisionero.
El éxito de la conferencia de la Celac y las visitas de los secretarios generales de la ONU y la OEA dieron esta semana a Cuba grandes triunfos diplomáticos. La Casa Blanca sabe que no puede ignorar más el rol internacional y continental de la isla, pero, si quiere mejorar las relaciones, no podrá soslayar la liberación de los cuatro agentes cubanos presos. No basta con una vaga promesa como la de cerrar Guantánamo.
Fuente: http://sur.infonews.com/notas/guantanamo-y-los-heroes-en-la-agenda-de-obama
Tomado de Rebelion
Imagen agregada RCBaez
Chávez, el que se animó a encender la madrugada
4 de Fevereiro de 2014, 1:09 - sem comentários aindaPor Daniela Saidman
La historia de los pueblos tiene sus hitos, como la piel guarda la memoria de caricias y heridas viejas, y se estremece cada tanto al recordar todo lo que de bueno o doloroso ha pasado por su geografía. Así somos, memoria transida de voces y recuerdos, capaz de levantarnos luminosos una mañana, cuando la vida nos convoca a escribir el futuro.
A lo mejor por eso se quedó para siempre el tacto de aquel 4 de febrero de 1992 cuando asistimos a uno de esos puntos de inflexión que nos cambió a todos. Después de ahí nada seguiría igual porque en esa fecha se encendió una llamarada que ya nada podrá apagar.
Aquel Chávez que irrumpió en las pantallas de la televisión se sembró en la memoria sí, pero también se subió a los mástiles donde ondean las esperanzas y con cada viento que pasa vuela más alto como extendiendo las alas.
Una rebelión de esperanza
La del 4 de febrero, la rebelión que unió a civiles y militares, será recordada y celebrada siempre por la mayoría del pueblo como una acción cuyo objetivo era la libertad. Es cierto que no se consiguió en ese momento, pero a veces perdiendo también se gana. El 4F sirvió para despertar y sacudir conciencias, y ayudó a alejar los miedos que había instalado la represión del 27 de febrero de 1989, que dejó tres mil muertos en apenas tres días.
Dijo por ahora -Chávez, imposible olvidarlo- y dejó la ventana abierta para que el sol entrara a raudales y lo inundara todo con su luz, quedándose aunque estuviera preso. Y eso hizo, ¿no? Quedarse para siempre. ¿Quién hubiera dicho que aquel teniente coronel que se animó a asumir el acto de rebelarse contra el poder estaría sembrado tierra, sueño y esperanza adentro, tan Barrio Adentro como las misiones que creó para el beneficio de tantos y de tantas? Será precisamente por eso que Chávez, el comandante que hizo posible la utopía, se nos ha ido repartiendo en el aire, en las palabras, en los actos y en los gestos cotidianos para vivir siempre como esa caricia amasada a fuego lento en nuestra historia.
“Desde lo más hondo del corazón del pueblo digo con Aquiles Nazoa que gracias al 4 de febrero cada compatriota puede con plena certeza 'tender una mañana la mirada sobre el paisaje y decir esta es mi ciudad, esta es mi patria'”, escribió Chávez para su pueblo el 4 de febrero de 2013.
Tan aquí y tan ahora su palabra que conmueve. Por eso, aquella imagen del ardimiento amoroso que guió a Chávez y que tan bien escribió el poeta Luis Alberto Crespo es el fuego que aún hoy todo lo enciende, todo lo incendia, alumbrando a su paso el futuro que haremos venir.
“Él es, es el mismo, el de siempre. Se asemeja todavía al capitán demócrata y sentimental que encendió con su palabra a un solitario pueblo llanero donde su bisabuelo cumplió una hazaña de pasión y machura, le digo yo ahora a mi memoria. De aquel 4 de febrero proviene su ardimiento. Hoy, enciende a Venezuela y a los pueblos de América y de más lejos”, eso dice Luis Alberto, el poeta que lo conoció allá en el Llano.
Y es que este Chávez del 4F es el muchacho bueno, el que se crece y multiplica en la juventud de ahora. A Chávez lo encontramos todos los días en los jóvenes que se juegan la vida para conquistar la paz, que es lo mismo que hacer nacer la ternura y la solidaridad, que fundar el futuro ahora, cuando la madrugada luminosa lleva su nombre.
Mensaje del Comandante Chávez el 4 de febrero de 2013 (fragmento)
“El Caracazo señaló un fin y un comienzo, fin de un sistema ahogado en la desvergüenza, comienzo de una época de cambios que exigía renacer en dignidad popular.
Quienes irrumpimos contra las tinieblas de la injusticia y la indignidad que abrumaban a Venezuela por aquel entonces estábamos como decía el Che Guevara guiados por grandes sentimientos de amor, un amor bolivariano, popular, rebelde, combatiente, un infinito frenesí libertario que nos llevó, como quería el padre Libertador, a echarnos al miedo a la espalda para salvar la patria.
Nuestro poeta Gustavo Pereira nos dice con estremecedora simplicidad los siguiente: “El amor es la única cosa importante en el mundo”, han transcurrido 21 años desde aquel 4 de febrero, de angustia y madrugada, de valentía y sacrificio, y la marcha sigue siendo dura, pero con la fuerza irresistible del amor recordemos a Bolívar estamos a paso de vencedoras y de vencedores hacia la independencia definitiva, hacia la patria socialista y liberada”.
Hugo Chávez Frías
La Habana, Cuba, 04 de febrero de 2013
@DanielaSaidman
Imagen tomada de La Cámpora (www.lacampora.org)
Publicado en DESDE LA OTRA ORILLA
Cuba presidirá Asamblea Mundial de la Salud
4 de Fevereiro de 2014, 0:22 - sem comentários ainda
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Cuba presidirá este año la 67 Asamblea Mundial de la Salud, lo cual es un reconocimiento a los logros de la Revolución en esta esfera y a su papel en la arena internacional, declaró el doctor Antonio González.
La participación de Cuba en la Organización Mundial de la Salud, OMS, es muy reconocida, así como también su colaboración con el resto del mundo en este campo, afirmó a Prensa Latina González, quien es jefe del departamento de organismos internacionales del Ministerio de Salud Pública.
La Asamblea, que se celebrará entre el 19 y el 24 de mayo, es la instancia de decisión suprema de la (OMS), fundada en 1948.
En estos momentos miles de médicos y otros trabajadores del sector de la nación caribeña mantienen su cooperación en unos 60 países de diversos continentes.
González participó en esta ciudad suiza en el 134 Consejo Ejecutivo de la OMS, integrado por 34 países de todas las regiones del mundo, entre ellos seis de América.
En esta oportunidad se analizaron diversos temas, como un plan para la eliminación de la tuberculosis de aquí a 2025 y otro para terminar de erradicar la poliomielitis, así como las metas de salud para después de 2015, dijo el doctor.
Otros asuntos también examinados fueron la nutrición del lactante y el niño pequeño, la hepatitis y el decenio de las vacunas.
El Consejo Ejecutivo analizó, además, las reformas de la OMS, sobre todo en materia de gestión, planificación y las estructuras de gobierno.
El funcionario recordó el papel de la OMS, máximo órgano de salud perteneciente al sistema de las Naciones Unidas que agrupa a 197 países, y está encargado de gestionar políticas de prevención y combate a los principales problemas sanitarios a nivel global.
Cada región tiene sus particularidades, por ejemplo en África son más frecuentes las enfermedades infecciosas como el paludismo, la malaria, el tétanos y la poliomielitis, explicó.
Pero aún en África y en todo el mundo uno de los temas de mayor preocupación hoy en día son las enfermedades crónicas no trasmisibles, que ocasionan los mayores problemas.
En ese sentido mencionó las cardiovasculares, el cáncer y la diabetes, que se han difundido mucho internacionalmente, y la propuesta es encararlas con un enfoque de promoción y prevención.
El doctor explicó que lo fundamental es evitar su aparición y para ello es importante una dieta sana, hacer ejercicios físicos, evitar el tabaquismo y muchas otras acciones de carácter preventivo.
"Tenemos que luchar mucho para crear en la población hábitos saludables para no solo vivir, sino vivir con calidad", expresó.
Texto tomado de Radio Habana Cuba
Comandante Víctor Bordón Machado: Una mitad de león y otra mitad de sinsonte
3 de Fevereiro de 2014, 1:50 - sem comentários ainda
Iba a escribir una décima tras la nefasta noticia de su muerte, pero me detuve en esta cuarteta con la cual creí definirlo de cuerpo y alma:
De sol, de estrella y de monte
así era Víctor Bordón:
una mitad de león
y otra mitad de sinsonte.
Llevaba la apariencia de un hombre hosco y huraño, mas no creo que mucha gente sobre la tierra lo haya igualado en bondad, humanismo, honestidad y corazón abierto hacia los más desvalidos.
Poseía el sentido del humor original del aprendiz de lechero, el cortador de caña frustrado y el estibador buscavida del central San Isidro (hoy Panchito Gómez Toro), capaz de echarse un saco de 320 libras sobre el hombro, subir por las tongas hacia el copo del almacén y, luego por la tarde, irse al bar Yara, de Quemado de Güines, y gastarse lo ganado con sus mejores amigos de entonces.
Nacido en la finca Sevilla el 16 de agosto de 1930, portaba un apellido agudo y un vozarrón, que le daban aún más vigor a su guapería guajira, probada y respetada. Fueron muchas las trompadas que dio en defensa de un amigo de constitución física más endeble que la de él. Fueron muchas las gentes que socorrió en su paso por la historia y por la vida.
Siempre expuso que entró como revolucionario por la puerta de la justicia. Por eso se incorporó en las filas del Partido Ortodoxo, de Chibás, y al Movimiento 26 de Julio. Por eso se alzó en la manigua quemadense en un noviembre de 1956 en la espera del arribo de su ídolo de ayer y de hoy. Nunca se ocultó para decir: «El nombre de mis ideas es Fidel».
Bordón abraza a su destacado combatiente Julián Morejón luego de que este último fuera declarado Hijo Ilustre de Quemado de Güines. (Fotos del autor y cortesía de la familia) |
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Atacó el cuartel de Quemado de Güines en busca de armas para apoyar la Huelga del 9 de Abril con un grupo de hombres fieles, que nunca lo abandonaron ni a los que él abandonó. Se fue hacia el Escambray nombrado de comandante, aglutinó a cerca de 300 hombres y recibió allí al legendario Che Guevara en octubre de 1958.
Así definía el encuentro en el lugar conocido por Las Piñas:
«Vi delante de mí a un hombre pálido que venía con un ataque de asma y sin un atomizador en la mano. Tanto él como sus hombres se veían destruidos por el cansancio, pero destilaban moral combativa por todos los poros». Y me dije: «Este argentino está poniendo a prueba hasta su salud». Imponía respeto por encima de sus problemas físicos.
«Me pareció una figura legendaria y un hombre distinto. Y no me equivoqué. Lo vi como un gaucho que venía a pie desde Oriente mandado por Fidel. Por eso, a primera vista me subordiné. Y a más de 50 años de aquella idea, la contemplo como la actitud más correcta que he tenido en mi vida».
Dentro de un secadero de café iniciaron las conversaciones los dos jefes guerrilleros. El Che se ceñía en la cabeza una boina negra con una estrella de color dorado. Bordón sujetaba su gorra verde olivo en la mano izquierda y daba molinetes con la otra a un tabaco casi apagado.
Guevara señaló la férrea disciplina que debía prevalecer dentro de la Columna 8, y la unidad que se proponía materializar con las demás fuerzas guerrilleras que operaban en el Escambray.
Degradó a Bordón al grado de capitán dentro de las fuerzas reorganizadas; y Víctor, sin sorpresa, le respondió escueto y transparente:
«No estoy aquí por aspirar a ningún cargo, déjeme combatir a su lado como un soldado más».
Esta respuesta caló muy hondo en el Che, quien no esperó escuchar aquella frase. Después, en un mensaje, le expresaba a Fidel que al conocer a Bordón le había dado la impresión de ser una persona noble y honesta.
Apenas 20 días después, tras la toma exitosa del aeropuerto de Fomento, el Che le devolvió los grados a Bordón con esta frase ingeniosa: «Buen trabajo, comandante».
Sin embargo, a Fidel se le quedó impregnada en la mente aquella actitud y en la década del 90 le preguntó:
Bordón, ¿cómo en el Escambray subordinaste al Che tu tropa de más de 200 hombres y permitiste que te rebajara los grados de comandante a capitán?
Y Víctor le respondió:
«Por varias cosas, comandante: alguien de mayor grado que él le pidió que me llevara recio a ver lo que yo daba; y tuve muy presente que ese argentino no fue por gusto el primer comandante que usted graduó en la Sierra Maestra.
«Además, me encontré frente a un hombre que, a pesar de sus fuertes ataques de asma y sus ropas totalmente raídas, mientras hablaba iba creciendo ante mis ojos con un lenguaje ajeno a toda politiquería barata. Yo buscaba la unidad como único medio posible de la victoria, pues las divisiones, el regionalismo y el caudillismo habían provocado las derrotas de las anteriores guerras de independencia».
Entonces, Fidel lo abrazó y expresó ante un grupo de jóvenes:
«Miren a este guajiro, quien en aquel momento era un simple estibador de sacos de azúcar, con solo un tercer grado de escolaridad, la ideología patriótica y revolucionaria que tenía».
Con el Che en la toma de Cabaiguán. |
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Víctor Bordón se distinguió junto al Che en los combates de la ofensiva final en la toma del cuartel de Fomento, la liberación de la ciudad de Cabaiguán, Guayos, Placetas y Santo Domingo. Impidió de forma homérica, al frente de su tropa, la entrada de un convoy de refuerzo de Occidente a Santa Clara, y capturó al sanguinario Casillas Lumpuy, quien asesinara por la espalda al líder azucarero Jesús Menéndez.
El Che lo designó como su segundo al mando en La Cabaña, y luego anduvo como edificador de presas en la parte oriental de Cuba y jefe del sector de Construcciones del Ministerio del Interior en Matanzas, hasta fundar la niña de sus ojos: la empresa de construcciones metálicas, Cometal.
Villa Clara lo recuerda como el hijo que nunca olvidó a su terruño y aportó siempre lo que pudo y más de lo que pudo. Fue su diputado por dos mandatos, y podía estar presente la visita más importante en la provincia, que siempre sus máximos dirigentes buscaban un espacio para saludarlo y abrazarlo. Hombre con un concepto trascendental sobre la familia, crió junto a Magaly, su inseparable esposa, una prole respetuosa y afectiva de hijos, nietos y bisnieto.
Por todo ello, no sería un poeta pertinente si dejara mi décima sin sellar los seis versos que faltan:
Fue cielo, mar y horizonte,
feliz, audaz, campechano
mejor padre, buen hermano;
y tendrá siempre respiro
mientras exista un guajiro
con un fusil en la mano.
Gustaba relacionarse con el pueblo. En la foto, cantando su canción mexicana favorita: Sigo siendo el rey. |
Tomado de Periódico Vanguardia |
Se busca un héroe
3 de Fevereiro de 2014, 0:52 - sem comentários aindaPor Karina Marrón González
De tanto decirles héroes a veces olvidamos que son o fueron seres humanos de carne y hueso, quizás porque no contamos los actos heroicos como se cuentan las novelas o las películas.
Y en ese camino vamos sembrando una distancia, un encumbramiento que en ocasiones nos hace creer que nunca podríamos ser como ellos. Entonces, repetimos las historias en esa encartonada forma que un día hace que los héroes ya no sean verdaderamente personas, sino leyendas a años luz de los sentimientos como el miedo, la duda o el amor.
Recientemente a un buen amigo su hija le preguntaba qué le gustaba a Martí, y eso lo puso ante la difícil tarea de rebuscar en libros y anécdotas esa otra parte del Apóstol que se nos ha perdido: la de saber si prefería los espaguetis, los mangos o las guayabas, la de descubrir sus más pequeños y secretos placeres, aun cuando mucho dijo de sí mismo en versos y prosa.
A mí nunca me fueron más cercanos los jóvenes de la Generación del Centenario que en esos pequeños recuerdos que atesoran sus familiares y amigos, y que de vez en vez algún medio o persona acuciosa, como mi profe María Julia, logra sacar a la luz.
Del mismo modo me ha sucedido con los Cinco. Muchos años llevamos hablando de la injusticia que se ha cometido en su caso y, como cubana, entiendo la grandeza de su sacrificio para proteger a nuestro país de tantos retorcidos planes que se han tejido con los hilos del odio. Sin embargo, nunca entendí bien la dureza de la prueba, la renuncia de estos hombres y sus familias, hasta que vi a Irma, la hija mayor de René, embarazada, y me pregunté cómo me sentiría yo misma si estuviera en su lugar y no pudiera compartir esa alegría con mi padre.
Gerardo se me tornó inmenso en el pensamiento el día en que junto a unos amigos visité a María Orquídea Artiles Ruiz, en Cienfuegos. Esta sencilla mujer ha dedicado su casa a la causa de los luchadores antiterroristas cubanos y siempre que alguien va a verla, recuerda con especial cariño el día en el que escuchó la voz de Gerardo en el teléfono.
A pesar del reducido tiempo que le dan para comunicarse con su familia y abogados, él dedicó unos minutos para preocuparse por ella y brindarle consuelo ante la pérdida de su madre. Como si en lugar de cumplir una condena de dos cadenas perpetuas más 15 años, se tratara del amigo que está a la vuelta de unos pocos kilómetros, en una provincia vecina.
Sé, porque he tenido el privilegio de escuchar las anécdotas durante la realización del Coloquio por la liberación de los Cinco en Holguín, que Ramón, Tony y Fernando también han compartido ese tiempo, y que junto a sus hermanos se han convertido incluso en consejeros o han aliviado las tensiones entre padres e hijos.
Cada vez que escucho estas historias se me renuevan las energías para hacer algo, aunque parezca muy poco, para luchar por su regreso. Porque 15 años es demasiado para ellos y sus familias que esperan, y porque la humanidad necesita que los hombres buenos compartan su corazón, multipliquen su ejemplo.
Y no es que no sea suficiente para admirarlos el saber las razones por las cuales estaban en Estados Unidos, la dignidad con la que decidieron enfrentar la prisión antes que aceptar cualquier trato engañoso que tergiversara el hecho de que no pretendían otra cosa que proteger a su país de las agresiones provenientes de grupos terroristas, radicados en esas tierras del Norte. Pero tanto hemos andado en este camino por su libertad, que temo a veces que un día despierte sin que me duela su encierro, sin las ansias de buscar qué más hacer para que vuelvan pronto.
Es por eso que ayer cuando escuchaba a alguien decir que en el pueblo hay muchas historias que revelan la esencia de estos, nuestros héroes modernos, no pude sino tener ganas de conocerlas todas. Se me antojó recopilarlas, para que no anden dispersas entre tanta gente de Cuba y el mundo, y luego compartirlas, porque quizás en ellas se encuentre la fuerza que sea capaz de abrir las rejas que los mantienen lejos de casa.
Si se animan a colaborar pueden contactarme en la redacción del periódico Granma o escribirme a mi correo personal: karina@granma.cu.
Estaré esperando.