EE UU puede vetar el vuelo a viajeros desde España a Cuba, Canadá y México
23 de Setembro de 2012, 21:00 - sem comentários aindaSi aún -a estas alturas "del campeonato"- hiciera falta prueba alguna de la prepotencia y las ansias de dominio imperiales, este podría ser un buen botón de muestra:
EE UU puede vetar el vuelo a viajeros desde España a Cuba, Canadá y México
Por N. JUNQUERA / M. CEBERIO BELAZA.
Diario El Pais , Madrid 24 SEPTIEMBRE 2012 *
Washington controla desde marzo los datos de miles de pasajeros que sobrevuelan su espacio aunque no hagan escala. Protección de Datos pide un marco legal
“La Comisión Europea es muy débil ante EE UU. Esto es un chantaje”(1)
Hernando Calvo Ospina, periodista colombiano de 51 años, colaborador de Le Monde Diplomatique y residente desde hace 25 en París, se quedó el pasado 6 de mayo en tierra, en el aeropuerto de Madrid-Barajas, porque un funcionario de la Embajada estadounidense le impidió embarcar a un tercer país: Cuba. Un vuelo directo a La Habana que no hacía escala en Estados Unidos. Él lo cuenta así: “Me pidió mi pasaporte y me dijo que no podía subir al avión porque la ruta sobrevolaba durante unos minutos el espacio aéreo estadounidense y yo estaba en una lista de personas que pueden atentar contra EE UU (2).
Yo había hecho ese mismo vuelo el octubre anterior y no me había pasado nada”.
EE UU y la Comisión Europea firmaron el pasado diciembre un acuerdo —aprobado en abril por el Parlamento Europeo— (3) que obliga a las compañías aéreas europeas a suministrar al Departamento de Seguridad del Territorio Nacional estadounidense datos de pasajeros, pero solo de vuelos con origen o destino en EE UU. El acuerdo, conocido como PNR (de registro de datos de pasajeros) no sería aplicable, por tanto, a este caso. ¿Qué ocurre entonces? Las autoridades norteamericanas exigen unilateralmente desde marzo a todas las aerolíneas europeas, a través del programa Secure flight overflight, que envíen antes del despegue el nombre, la fecha de nacimiento y el sexo de los pasajeros de aviones que sobrevuelen el espacio de Estados Unidos.
Las razones que alega EE UU son de seguridad: la posibilidad de que uno de los viajeros secuestre el avión y cambie la ruta. Por eso, los que están en su lista de indeseables no vuelan aunque no vayan a pisar suelo estadounidense. Las líneas aéreas están obligadas a meter en el sistema informático correspondiente los datos de los usuarios de estas rutas (si no lo hacen, no pueden volar), y Washington bloquea directamente la emisión de tarjetas de embarque de los que aparecen en sus listas.
Cuando esto sucede, la aerolínea no puede hacer nada más que llamar a los funcionarios estadounidenses, a los que se permite operar en aeropuertos españoles en virtud de un acuerdo firmado en 2009 entre EE UU y el Ministerio del Interior. Los norteamericanos pueden interrogar al pasajero y son quienes deciden si finalmente puede volar. Además, al tener Washington en su poder desde marzo los datos de viajeros a terceros países, puede conocer, por ejemplo, cuántas veces ha viajado una persona a La Habana y con quién.
¿A cuánta gente afecta esta política estadounidense? En España, a miles de pasajeros con tres destinos: Cuba, México y Canadá. Implica a dos compañías españolas (Air Europa e Iberia) y a dos aerolíneas extranjeras que operan vuelos desde España (Aeroméxico, y Air Transat).
Cuando se compran billetes a Toronto, Montreal, México D. F. o La Habana, lo último que puede imaginar el pasajero es que sus datos van a ser cedidos a EE UU. A pesar de ello, ninguna de las cuatro compañías informa debidamente. Iberia —con varios vuelos semanales a Cuba y a México—, Air Europa —con seis o siete vuelos semanales a La Habana— y Aeroméxico no lo hacen. Las dos primeras aseguraron a EL PAÍS que van a empezar a hacerlo en breve. Air Transat es la única que avisa, pero en la pestaña de información para viajeros de su web, no en el momento de comprar el billete.
“La falta de información supone una vulneración evidente de la ley de protección de datos y el usuario podría reclamar”, señala Rubén Sánchez, de la asociación de consumidores Facua. “La cesión de datos debe ser comunicada. Todo el asunto es un exceso y una medida desproporcionada de EE UU”. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) coincide en que los pasajeros tienen derecho a conocer que sus datos van a ser entregados a otro país.
IU registró en el Congreso en mayo una pregunta al Gobierno sobre este asunto. El Ejecutivo respondió que esas actuaciones “se amparan” en el acuerdo entre EE UU y la UE aprobado en abril. Pero dicho pacto no hace alusión al sobrevuelo del espacio aéreo. Su artículo segundo lo deja claro: el acuerdo se aplicará “a compañías que operen vuelos de pasajeros entre la UE y los EE UU” y a “compañías que incorporen o almacenen datos en la UE y que operen vuelos de pasajeros con origen o destino en EE UU”. Un portavoz de la Comisión Europea confirma que los sobrevuelos no están incluidos en el acuerdo, informa Luis Doncel.
La Agencia Española de Protección de Datos dice estar “muy preocupada” por esta situación. “¿En qué norma europea se basa una compañía española para ceder estos datos? ¿Cuáles son las garantías en cuanto al tratamiento de estos datos? No hay marco legal europeo que ampare esta práctica”, advierte un portavoz de su área internacional.
La agencia ha tratado la cuestión con sus homólogas de otros países de la UE. “Hemos transmitido la información a la Comisión Europea. Ahora son ellos los que deben actuar. Es una situación atípica. Además, pone en una situación complicada a las compañías aéreas. Hacen todos los esfuerzos para cumplir con EE UU, porque si no lo hacen no vuelan, pero pueden entrar en conflicto con la legislación de protección de datos”. Desde la Comisión Europea no se respondió a EL PAÍS sobre si va a adoptar alguna medida.
Las propias compañías parecen tener dudas de cuándo deben comunicar los datos. Iberia asegura que solo los facilita en sus vuelos a México, pero no en el Madrid-La Habana porque esta ruta no está incluida en la lista de trayectos afectados que les envió EE UU. Air Europa dice lo opuesto: que ese vuelo sí está incluido, que está obligada a entregar los datos so pena de cuantiosas multas.
Hernando Calvo no pudo coger un vuelo que ya había pagado y que le había costado 744 euros. Así que reclamó a Air Europa que le reembolsara esa cantidad. La aerolínea le respondió que no se hacía cargo “porque es obligación de todos los pasajeros llevar consigo la documentación necesaria y tenerla a disposición de las autoridades”. Calvo la llevaba: su pasaporte estaba en regla y no necesitaba nada más para volar a Cuba.
* Ver texto original: http://politica.elpais.com/politica...
1- http://politica.elpais.com/politica...
2- http://politica.elpais.com/politica...
3- http://sociedad.elpais.com/sociedad...
Hernando Calvo Ospina Foto Virgilio PONCE
Las etiquetas de la dictadura
23 de Setembro de 2012, 21:00 - sem comentários aindaPor Ronnie Huete Salgado*
La dictadura que mantiene atrapada a Honduras pone en marcha su nueva etapa de consolidación, a través de la apertura de nuevos partidos políticos en las próximas elecciones presidenciales.
Informar, investigar o comunicar en Honduras a través del periodismo es un nuevo delito que se paga con la muerte.
Con los recientes asesinatos de dos periodistas en el mes de mayo de 2012, y otros dos en menos de una semana, suman 22 los periodistas asesinados en la dictadura “moderna” que en pleno siglo XXI, se desarrolla sin oposición política alguna en Honduras.
Los periodistas Erick Martínez y Alfredo Villatoro son los últimos profesionales que cometieron el delito de comunicar. Por el lado de Martínez, un luchador de los derechos humanos y Villatoro, un acérrimo locutor de radio.
Sin embargo, en Honduras la política sigue su rumbo en medio de la sangre, la persecución, las amenazas a muerte, el crimen organizado, secuestros, tortura, asesinatos de los pueblos originarios, y otros elementos de descomposición estatal que fortalece su dictadura.
Etiquetas políticas
Los ecos de promesas y cambios emitidos por las voces de los políticos de todos los tiempos, ya se hacen sentir entre su población, puesto que el país está a menos de medio año de celebrar sus elecciones primarias.
En el escenario de las etiquetas políticas ya se vislumbran los dos partidos de derecha tradicional, los pequeños y el nuevo ingrediente de los partidos que por primera vez participan y se suman a los denominados partidos “bonsay”.
Las leyes electorales tienen ya una vigencia prometedora en la defensa de la constitución, la democracia y la legislación de este país centroamericano, defender los intereses de quienes la crearon.
El nacimiento de las leyes electorales en Honduras hechas por quienes arremeten con golpes de Estado, por mencionar uno de los elementos de un estado de terror, sigue su curso en la más plena tranquilidad.
Por su parte, la etiqueta de la izquierda quien neciamente se autodenomina constructora del socialismo, ha decidido participar en el juego de las leyes electorales afianzando así la dictadura “moderna” en pleno siglo XXI.
Subasta de cargos
La subasta de candidaturas a diputado, alcalde, presidente, y todo el andamiaje ya decadente del estado corroído de Honduras, está en marcha.
Por la etiqueta de la izquierda prometen mudar una constitución a través de la vía electoral, con los mismos personeros que desde hace casi tres años torturan, persiguen, y asesinan al pueblo que verdaderamente lucha en contra de la dictadura.
Sin embargo los logos son muchos, haciendo una mistura de lucha contra la corrupción, contra el desempleo, y el nuevo ingrediente más utilizado, mudar la constitución.
Todo el ambiente político se desenvuelve adentro del secuestro que Honduras padece por la violencia desatada por el crimen organizado, narcotráfico, tráfico de personas y demás componentes que han invalidado la vida de un ser humano en el centro de América.
Pero en Honduras, ni los muertos se salvan de la política, y más cuando han sido asesinados, puesto que sin respeto alguno son politizados hasta el cansancio.
Mendigos mundiales
Tanto así que algunos micro-organismos seudopolíticos se van hasta la necedad de pedir fuertes sumas de dinero, a países del norte de Europa, Estados Unidos u organizaciones no gubernamentales de derechos humanos. Todo en pro de una resistencia.
Tal soberbia los ha hecho creer locamente que ellos son los merecedores del poder y hacen un derroche con el dinero que les envían en nombre del pueblo. Convirtiéndolos en seres inertes de la más cruda necedad jamás vista en esa tierra.
Los nuevos asesinatos de los periodistas Erick Martínez y Alfredo Villatoro, comprueba la grave impunidad y vulnerabilidad en que se encuentra ese aparente Estado, envuelto en la peor de sus dictaduras.
Sin duda las etiquetas de la derecha y de la izquierda hondureña tienen un mutuo acuerdo. Participar en las elecciones en pro de la “democracia” en medio de la dictadura.
*Periodista y realizador hondureño; es corresponsal voluntario de la revista Caros Amigos editada en são Paulo (Brasil) para Centroamérica, la agencia informativa latinoamericana Prensa Latina, Kaos en la red y el portal Desacato, editado en Florianópolis, Brasil
Cualquier atentado o amenaza para el autor de este artículo es responsabilidad de quienes representan y gobiernan el Estado de Honduras
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
Nota: Aunque no coincidimos en todos los aspectos con lo manifestado por el autor, nos sumamos a la denuncia de los crímenes que continuan ocurriendo impunemente en tierras de Morazán [N. del E.]
Reciben a Caminantes por los Cinco en Asamblea Nacional de Ecuador: Descargue resumen de las crónicas
21 de Setembro de 2012, 21:00 - sem comentários aindaContinúa el hermoso y solidario periplo de los Caminantes por Los Cinco, por esta América nuestra. Hace sólo dos días fueron recibidos por los Parlamentarios Ecuatorianos.
Junto a esta noticia estamos compartiendo con ustedes, en documento pdf, una compilación de las veinte crónicas difundidas por el Comité Internacional por la Libertad de Los Cinco, de una parte de este recorrido. Próximamente les iremos compartiendo otras compilaciones, hasta que finalice esta hermosa acción solidaria:
Descargue aquí:
Reciben a Caminantes por los Cinco en Asamblea Nacional de Ecuador
ECUADOR, 20 de septiembre de 2012.- El grupo parlamentario de amistad con Cuba recibió en la Asamblea Nacional a Darío Valenzuela, Milco Figueroa y Juan Tola, integrantes del proyecto solidario “Sembrando caminos por los Cinco”, quiénes realizan un viaje en motocicletas por América del Sur para promover el apoyo a la causa de los cinco luchadores antiterroristas cubanos injustamente sentenciados a largas condenas de privación de libertad en Estados Unidos.
Silvia Salgado, presidenta del Grupo, se refirió a la injusticia que se comete contra los cinco patriotas cubanos y la necesidad de multiplicar las acciones para romper el silencio de los grandes medios. También informó sobre las gestiones que lleva adelante la Asamblea Nacional del Ecuador para incrementar la participación del pueblo ecuatoriano en esta lucha y fortalecer el reclamo internacional de justicia.
Los jóvenes, graduados en la Escuela Latinoamericana de Medicina, contaron a los asambleístas participantes sobre sus impresiones durante la travesía por Venezuela, Colombia y la magnífica acogida en tierra ecuatoriana. Explicaron que el viaje persigue el objetivo de involucrar nuevos actores en esta dura pelea para que finalmente se haga justicia. Añadieron que para ellos es una forma de retribuir a Cuba y a su pueblo, siempre tan solidarios.
(Cubaminrex-Embacuba- Ecuador)
Máquina del tiempo
20 de Setembro de 2012, 21:00 - sem comentários aindaUn joven me invito en Facebook a leer un texto suyo sobre la Brigada Henry Reeve, constituida por jóvenes médicos internacionalistas...
Estimada: Soy un joven cubano que vivo en Chile hace unos años. Aquí le envio una nota que hice sobre lo realizado por la Henry Reeve a su paso por Chile. Un abrazo:
Me gustó el trabajo, lo difundí rápidamente y me puse a "chusmear" en su blog... y di con esta verdadera joya... sólo puedo decir que a mí me hizo llorar...
Yo conozco la máquina del tiempo. Me he subido un par de veces en ella, ignorando totalmente esa capacidad.
Estoy seguro que no soy el único que la conoce. Siento que aquellos que han vivido la distancia, el exilio, saben claramente a qué me refiero.
Aún recuerdo y puedo sentir en mis venas el sabor de las calles en que anduve una vez. Aún puedo llegar a la cola de la 190 y pedir el último y esperar eternamente hasta hoy. Aún puedo verme dándole una vuelta al árbol que está en el Parque de la Fraternidad.
Tomé mi maleta, hace ya varios años (qué increíble: “hace ya varios años”) y la llené de prendas y cajas de tabaco. Guardé monedas del Che y grabé todos los discos de Silvio Rodríguez. También pude conseguir la última producción de Habana Abierta y el recién estrenado disco de Interactivo “Goza pepillo”.
Gracias al formato mp3, casi toda esa música cupo en 3 o 4 discos y partí de La Habana con el impulso que le dio al avión, las melodías de Carlos Varela que zumbaban en mi oído.
Mi ciudad se hizo tan pequeña, al punto que pude guardarla en una mirada. Tras el último adiós, empezó de inmediato el mundo nuevo, justo cuando la aeromoza me ofreció una Coca Cola y la comida compacta.
Hice dos escalas en unos aeropuertos inmensos y llenos de productos, tan llenos que me colmaron y dejé de lado por un rato mis canciones.
Finalicé mi viaje en Santiago y viví allí por primera vez la máquina del tiempo, sin sospecharlo siquiera.
En el aeropuerto Arturo Merino Benítez sentí un estruendo en la cabeza que no pude comprender con claridad a mis 19 años. Mi padre estaba un poco más viejo, su cabeza gris y sus manos eran tristes como la cordillera. El abrazo fue fuerte, pero no lloré. Hoy sé, o por lo menos creo saber, por qué no lloré. No lloré porque ese no era mi padre, mi padre tenía el pelo largo e intensamente castaño; sus manos eran fuertes y las arrugas que tenía eran muy pocas.
Aquel señor que me invitó un café, era mi padre en el futuro, no el que dejé de ver. En el dedo anular de su mano izquierda había un anillo, que en el pasado fue de mi abuelo y bastó un gesto, para darme cuenta que no había nada que preguntar.
Al pasar los días y los meses redescubrí a mi viejo, a mi abuela, a mis primos, a mis tíos.
No todo el proceso fue triste, recuerdo en la mesa, a la hora del almuerzo, toda la familia chilena muertos de la risa con las historias que les contaba de mi Habana y sus particularidades.
La comida era diferente, sabrosa, pero poco a poco empecé a extrañar, desde el bistec, hasta el picadillo de soya.
Mi discurso era repetitivo, contaba las mismas historias una y mil veces: cantaba las mismas canciones, ponías los discos hasta sabérmelos de memoria, leía los mismos poemas y los cuentos que empecé a redactar tenían un estilo muy parecido y una cadencia única.
Pero insisto, no todo fue triste. Me asombraba con muchas cosas: los edificios, las plazas, el metro, el Internet y claro, mi primer celular. Parecía un guajirito en La Habana.
Cuando llamaba a mi madre, le contaba y hasta exageraba sobre las cosas que habían acá. Nunca lo hice con la intención de afirmarle que “esto” era mejor que “eso de allá”, pero es que para mí todo era tan sorprenderte que para que ella me entendiera, necesitaba exagerar un poco.
En Chile me enamoré, entristecí, volví a enamorarme, canté, aprendí a tocar la guitarra, conocí las luchas y me desilusioné. Al pasar de los años entendí que todo esto ocurría porque mi padre también navegó en la máquina del tiempo.
Para él, el exilio fue algo más que un viaje. Fue el destierro, pero mi padre estaba anclado en su puerto, en su ciudad. Me imagino lo triste que debe haber sido para él, mirar el horizonte pleno, pero no hallar su cordillera.
De niño supe de un Chile lindo, un Chile nuevo, no el de los golpes y los desaparecidos. De niño Chile sonaba a Manns, a Jara, a Parra, a Inti; sabía a sopaipilla, a cola de mono (sin alcohol); era en blanco y negro y tenía un fusil en la mano. En el aeropuerto de Pudahuel mi padre también sintió un estruendo en su cabeza y no pudo comprender qué había pasado. La cordillera ya casi no se veía, su calles eran grises y su pueblo tenía miedo. El abrazo fue fuerte, pero sé que no lloró.
No han pasado muchos años, pero “todo lo malo se ha ido bailando” como dirá alguna canción popular, y mi pueblo así lo hecho. Tal vez a regañadientes, tal vez aguantando los bloqueos, tal vez mirando con nostalgia la puerta de salida.
Son muchos los que han tomado un avión en mi país, en busca de “mirar un poco más allá”. Tengo cientos de amigos que han sido bebidos sorbo a sorbo por “la Coca Cola del olvido” y tengo varios más que se desgarran con añoranza por volver.
Yo muero por descargar una trova en la azotea de un amigo, por tomarme un ron Cienfuegos y despreocuparme por llegar junto al sol a mi barrio de Buena Vista. Pero nada es lo mismo. El viaje de ida no tiene vuelta. Cuando vuelves después de un par de años las cosas cambian, a pesar de que algunos insistan de que Cuba está detenida en el tiempo.
Intenté tomar el pasaje de vuelta seis años más tarde y fue mentira. Cuando llegué, La Habana era otra. Muchos no estaban y sólo eran mis amigos por correo o facebook. Mi madre había sufrido la misma transformación que mi padre y también tuve que redescubrir a cada uno de los míos. Mi primo menor, que era casi mi hermano, estaba en otra onda. Su tatuaje del Che en la espalda y su discurso cargado de desidia y apoliticismo lo delataban como un ser ajeno.
Nadie recordaba la melodía de “si tú te fuiste perdiste, yo no, yo me quedé”, canción de El Médico de la Salsa, un músico que ahora vive en Miami y se presenta en los programas de televisión de la mafia cubano-americana. La gente estaba en otra “vola’a”, casi todos tenían celulares y alguno que otro pensaba en emigrar para poder ayudar a la familia o para “progresar”.
Un día conversé con el vocalista de un muy famoso grupo cubano, Israel de Buena Fe y él me explicó todo. Cada palabra iba descifrando sus canciones, temas que conocía hace tiempo pero que jamás me senté con detenimiento a escuchar. Versos como “tengo un catalejo donde la Luna se ve, Marte se ve, hasta Plutón se ve, pero el meñique del pie no se me ve”, o como “y que aventurera que se ha puesto la juventud, le da lo mismo Tokio, Barcelona, que Moscú”, me hicieron mucho sentido.
A pesar de todo, como dijera Israel, “no puedo navegar contra la corriente”, tampoco puedo negar que tengo fe en mi pueblo y algo en él me da esperanza. Aún me siento libre en Cuba. Mi tierra navegará hacia donde su pueblo bogue, yo no puedo ser infeliz por eso. Tengo que reconocer que aquel que no vive el día a día, está condenado a aterrizar en otro tiempo, en el futuro de la página que se dejó de escribir.
Tomado de EL Blog de Mauricio Leandro.
¿Quién dio el crancazo a Ileana Ros-Lehtinen contra Vicente Feliú?
20 de Setembro de 2012, 21:00 - sem comentários aindaPor Edmundo García
Hoy quería comentarles sobre algo que tengo guardado desde hace unos días a la espera de alguna repercusión. Se trata de una tremebunda declaración de la congresista Ileana Ros-Lehtinen condenando la presencia en Estados Unidos del cantautor cubano Vicente Feliú porque la cree parte de un proyecto peligroso para la seguridad nacional. No es un chiste ni un comentario en una cafetería de Miami, es una alerta que hace la congresista cubanoamericana Ros-Lehtinen a la Secretaria de Estado Hillary Clinton en carta fechada el pasado 14 de septiembre. (http://foreignaffairs.house.gov/resources/library/documents/statecubaletter.pdf)
Vicente Feliú compareció en nuestro programa “La tarde se mueve” el miércoles 12 de septiembre. Habló telefónicamente desde Washington un día después de su llegada a los Estados Unidos invitado por el Comité Internacional por la Libertad de los Cinco. La capital era la primera ciudad en una gira artística que incluía también las ciudades de Nueva York y San Francisco. El trovador participó en el programa especial que “La tarde se mueve” dedicó a Los Cinco con motivo de cumplirse los 14 años de su injusto castigo en prisión.
Junto a Alicia Jrapko, Andrés Gómez y Saul Landau, Vicente Feliú dio su opinión libremente como la ha dado en todas partes, con la sinceridad que le caracteriza, con un compromiso asumido y demostrado con la libertad de Los Cinco que le honra. Los artistas grandes siempre han tenido compromisos con su época. No es desconocido cómo él piensa; en la oficina de intereses de Estados Unidos en La Habana, donde le dieron la visa esta vez como se la han dado otras, saben cómo piensa Vicente Feliú. Lo han escuchado pedir la libertad para Los Cinco en la radio, en la televisión y en la tribuna antiimperialista, que está frente al edificio que los diplomáticos norteamericanos ocupan en el malecón habanero. Ningún secreto o misterio hay sobre sus proyecciones políticas y sociales, que reafirman también sus canciones.
Es en medio de esa claridad y sin explicación aparente que cae la declaración de la congresista Ileana Ros-Lehtinen condenando la presencia de Vicente Feliú en Estados Unidos e incitando al Departamento de Estado a que suspenda el intercambio educacional y cultural con Cuba. Hay además un momento al final de la declaración que es bastante preocupante y hasta discriminatorio, cuando la congresista considera “ingenuo y deplorable” otorgar visas “a personas como Vicente Feliú”. Ileana Ros-Lehtinen, que no ha entendido bien que ella no es la Secretaria de Estado, parece que tampoco entiende que no es cónsul, ni fiscal, ni policía, y tiene a los seres humanos clasificados por “tipos de persona”.
Ileana Ros-Lehtinen habla de Vicente Feliú y de la Nueva Trova de Cuba con un conocimiento sospechoso; porque de música cubana ella ni siquiera conoce a Benny Moré. Si acaso a Celia Cruz, de la cual sus mayores debieron decirle (en inglés, porque su español todavía es infantil) que era alguien que cantaba en la sagüesera de Miami. Estoy casi seguro que Ileana Ros-Lehtinen no sabe ni bailar danzón; a lo mejor algunos de sus ayudantes o internos tira su pasillo, Aidita Santiesteban o Chris Ferrer quizás, pero ella no. Es por esto que tengo el presentimiento, que la lógica confirma, que su crítica a Vicente Feliú se debió a un crancazo que le dieron. ¿Quién pudo haber sido? Ahora les digo.
La visita de Vicente Feliú no tuvo un alto perfil. Que yo sepa, el único programa donde hizo declaraciones fue ese en “La tarde se mueve” del que les hablé anteriormente. Tampoco la declaración de la congresista Ros-Lehtinen conquistó de momento internet y la misma prensa de derecha de Miami ni siquiera la comentó. No se le dio bombo en El Nuevo Herald ni en The Miami Herald, ni en los canales Telemundo o Univisión, ni siquiera en la radio miamense. Pero sí hubo un lugar donde saltó con el amarillista título de “Congresista critica presencia en EEUU de trovador cubano defensor de ETA”.
Ese lugar es el blog Café Fuerte del bloguero y activista anticastrista Wilfredo Cancio Isla. También hubo un espacio de televisión que presionó contra Vicente Feliú y fue el programa de Pedro Sevcec en el canal 41 de Miami. Programa que casualmente produce el mismo activista anticastrista Cancio Isla. Estas pistas y “coincidencias” me llevan a creer que fue este bloguero quien le dio manigueta a la congresista o quizás a miembros de su staff para ponerle mala la visita al trovador cubano; porque el activista anticastrista Wilfredo Cancio Isla sí conoce a la Nueva Trova, sí ha saltado alto con el grupo Moncada y coreado las canciones de Vicente Feliú en la Casa de las Américas cuando era un estudiante políticamente confiable de la carrera de periodismo. Si alguien no le hubiera trompeteado a Ileana Ros-Lehtinen de lo “peligrosa” que era la presencia de Vicente Feliú para “la seguridad nacional” de Estados Unidos, seguramente ella lo hubiera pasado por alto.
Hay también un precedente. En un artículo publicado en el mismo Café Fuerte el 15 de septiembre del 2011 por el blogoteniente Wilfredo Cancio Isla, ya este se había ensañado con Vicente Feliú (y de paso con Silvio Rodríguez) llamándolo “trovador oficialista” de “fiel militancia progubernamental”, y contraponiendo a ambos a Pablo Milanés para dividir y encender la candela y manipularlo durante su visita a Miami. En esa oportunidad Wilfredo Cancio Isla no esperó un segundo, como hicieron otros medios, para publicar en Café Fuerte aquella carta de Pablo Milanés en polémica conmigo; carta que algún día seguro se podrá aclarar que también obedeció a otro crancazo.
Finalmente hay otra razón más general vinculada a la ética, a un patrón de comportamiento. No se trata solo de su enfermizo odio contra Vicente Feliú, o contra la Colmenita, o contra Gerardo Hernández o contra todo aquel que se le atraviese en sus famosos ataques de celo profesional, hay algo más serio y es que el bloguero y activista anticastrista Wilfredo Cancio Isla es uno de los periodistas que con más tendenciosidad cubrió el injusto proceso contra los cinco luchadores antiterroristas cubanos en Miami. Trabajando para El Nuevo Herald, recibió dinero del gobierno de Estados Unidos por intervenir en otros medios y fue el autor de un artículo donde se afirma que Los Cinco estaban dirigidos telepáticamente desde La Habana, y que era porque consumían ciertos alucinógenos que no se doblegaban. De una persona así es lógico suponer ciertas cosas. Por ejemplo, que contra todas las normas del periodismo tratara de influir en un oficial electo y cranquearle una declaración contra un artista como Vicente Feliú, que es un cubano libre y digno.
Nota:
*crancazo = cranque, cuerda: mensajes contra algo o alguien para crear un estado de opinión negativo hacia ese algo o alguien, y que se realiza de forma repetitiva para causar mayor efecto
Imagen agregada RCBáez
Con datos de La Pupila Insomne