Por Waldo Mendiluza*
La Habana (PL) El bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a Cuba durante más de medio siglo ha dejado pérdidas por un billón 66 mil millones de dólares y un daño humano calificado de invaluable en la isla.
Según el canciller cubano, Bruno Rodríguez, el dato del impacto económico del cerco de Washington responde a cálculos rigurosos y conservadores, considerando la depreciación del dólar frente al valor del oro en el mercado internacional.
Esas afectaciones constituyen una carga abrumadora para una economía como la nuestra, estimó el diplomático en esta capital, durante la presentación del informe sobre la resolución 66/6 de la Asamblea General de la ONU "Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba".
Rodríguez reiteró que el entramado de sanciones y medidas ejecutadas por la Casa Blanca representa el principal obstáculo para el desarrollo socio-económico del país caribeño de 11 millones 200 mil habitantes.
No hay en la isla un sector que escape de los efectos del cerco aplicado por sucesivas administraciones norteamericanas, y recrudecido durante la actual, que ha arreciado el acoso y la persecución a las transacciones financieras relacionadas con Cuba, advirtió.
El informe presentado por el canciller se someterá en próximas semanas -por vigesimoprimera ocasión- a la Asamblea General de la ONU, donde siempre ha sido respaldado desde 1992, y en octubre del año pasado recibió 186 votos a favor con apenas dos en contra (Estados Unidos e Israel).
De acuerdo con datos recogidos en el texto, el comercio exterior cubano sufrió entre abril de 2011y abril del año en curso afectaciones por más de tres mil 550 millones de dólares, un incremento del 15 por ciento respecto al período 2010-2011.
La imposibilidad de acceder al mercado estadounidense concentra al respecto el mayor impacto del bloqueo, el cual continuó lastrando las exportaciones de bienes y la adquisición de tecnologías e insumos.
Otro sector golpeado es el de las inversiones extranjeras, en áreas claves para el país caribeño como el petróleo, el turismo y la biotecnología, refleja el documento.
También el transporte, la educación y la industria muestran severos daños por sanciones que Washington mantiene o endurece ignorando el reclamo de la comunidad internacional de levantarlas.
DAÑO HUMANO INVALUABLE
En la presentación del informe cubano sobre la Resolución 66/6 de la Asamblea General, Rodríguez consideró invaluable el impacto humanitario del bloqueo de Washington.
Se trata de un cerco que afecta el acceso a materias primas, alimentos y medicamentos, lo que las convenciones humanitarias prohíben incluso en tiempo de guerra, apuntó.
Rodríguez expuso ejemplos de los daños en áreas sensibles de la sociedad, donde "provoca sufrimientos, carencias y dificultades que alcanzan a cada familia, niño, mujer y anciano cubanos".
El sector de la salud sufrió entre mayo del 2011 y abril del 2012 afectaciones por 10 millones de dólares, las cuales responden al alejamiento de los mercados y el incremento de precios de importación de material gastable, instrumental, medicamentos, reactivos, piezas de repuesto y equipos.
Los niños en la isla están entre las principales víctimas del bloqueo norteamericano, con casos como el del Cardiocentro Pediátrico William Soler, que no dispone del medicamento Levosimendán, empleado para tratamiento del bajo gasto cardíaco, fármaco solo producido en Estados Unidos por los Laboratorios Abbott.
Otro ejemplo del daño humano de esa política es la retirada de la firma estadounidense St. Jude, privando al Instituto de Cardiología y Cirugía Cardiovascular del equipo de mapeo anatómico tridimensional no fluoroscópico, clave para realizar ablaciones de arritmias complejas.
En el texto se señalan además consecuencias negativas para las áreas de Obstetricia y Ginecología, a partir de la imposibilidad de adquirir reactivos; así como en el control del VIH/SIDA, por la cancelación del contrato de venta de Kits de fabricación norteamericana para el diagnóstico de SIDA en niños de madres seropositivas, lo cual ocurrió cuando una empresa intermediaria canadiense supo que el destino final del producto era Cuba.
Por su parte el sector de la alimentación reporta -según el informe- daños por más de 131 millones 500 mil dólares, al analizar el período marzo 2011-marzo 2012.
La elevación de los costos financieros, el uso de intermediarios para pagar productos y la búsqueda de lejanos mercados son algunas de las dificultades denunciadas por la isla.
Para el canciller Bruno Rodríguez, el ataque al sector social por la política de la Casa Blanca responde al principio de rendir por hambre y sembrar descontento en el país, argumento esgrimido por Washington desde el triunfo de la Revolución, el 1 de enero del 1959.
EXTRATERRITORIALIDAD Y RECHAZO MUNDIAL
De acuerdo con el ministro de Relaciones Exteriores, no caben dudas del recrudecimiento del bloqueo por la administración del presidente Barack Obama, escenario dado por una mayor persecución de las transacciones financieras relacionadas con Cuba, independientemente del tipo de moneda y las normas bancarias vigentes en las naciones involucradas.
Como prueba, el titular explicó a la opinión pública que las multas del actual gobierno estadounidense pasaron de 89 millones de dólares en 2011 a 622 millones este año.
En junio del 2012, Estados Unidos anunció la imposición al banco holandés ING de una multa de 619 millones de dólares, la más alta de la historia a una entidad extranjera por sus nexos comerciales con Cuba, ilustró.
Una multa a la naviera francesa CMA CGM por prestar servicios a Cuba e investigaciones al banco español BBVA por su presunta participación en inversiones relacionas con la isla son otros ejemplos citados en el informe presentado por Rodríguez a periodistas.
El canciller cubano mencionó además las presiones ejercidas contra la dirección del Hotel Hilton, en Trinidad y Tobago, lo cual obligó al cambio de sede en diciembre del 2011 de la Cumbre Cuba-Caricom.
No solo entidades sufrieron la extraterritorialidad del bloqueo, a partir de casos como el de un danés a quien autoridades norteñas congelaron en febrero de este año 137 mil coronas danesas (unos 24 mil dólares) por la compra de tabacos cubanos en Alemania.
La unilateralidad del cerco prevalece pese al reclamo mundial de levantarlo, postura expresada por decenas de países en la Asamblea General de la ONU desde 1992 y por diversos foros y organismos internacionales.
En ese sentido, el canciller cubano recordó que tan sólo en el 2012 se pronunciaron para rechazar el bloqueo el Movimiento de Países No Alineados, la Unión Africana y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, organizaciones que agrupan a unas 120 naciones.
*Jefe de la Redacción Nacional de Prensa Latina
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