Por Yenisei García; Fotos Héctor Planes

  La Asociación Cubana de Naciones Unidas, ACNU, dedicó el día Internacional de Apoyo a las Víctimas de la Tortura a los Cinco antiterroristas cubanos injustamente prisioneros en Estados Unidos con un acto en el que expusieron algunas de las principales acciones que la entidad realiza por la liberación de Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Fernando González y Antonio Guerrero.

  Graciela Ramírez, coordinadora del Comité Internacional por la Libertad de Los Cinco, reflexionó sobre el vínculo de la tortura con las violaciones a los derechos humanos, maltratos, cantidad de ocasiones en que los patriotas estuvieron en celdas de aislamiento sin cometer infracción alguna, las restricciones de visita familiar y la privación del afecto de esposas como Olga Salanueva durante todo el período en que René González estuvo preso y bajo libertad supervisada y el castigo que se mantiene por 15 años de no otorgar visa a Adriana Pérez para visitar a su esposo Gerardo Hernández condenado injustamente a dos cadenas perpetuas mas 15 años de prisión.

  En ese sentido ejemplificó lo que han padecido los cinco y sus familiares durante estos tres lustros, exhortó a definir lo que significa el término tortura, que no es solo el martirio físico sino la  manipulación del derecho de una madre, una esposa o un niño a visitar a un prisionero, algo que se ha repetido en el caso de estos héroes hasta el momento actual.

  “¿Cómo se define que a una persona se le mantenga tanto tiempo preso y se le prohíba a su esposa que lo vea con regularidad?”. La coordinadora lo describió como el castigo sutil y perverso de querer quebrar la voluntad de un prisionero político a través de la falta de afecto.

  Explicó que los castigos en celdas de aislamiento máximo durante 17 meses a Gerardo, Fernando, Antonio, Ramón y René, superaron largamente los 60 días fijados como máximo por el Buró de Prisiones de Estados Unidos a quienes son enviados a lo que en el lenguaje carcelario se conoce como "el hueco" ya que transcurridos esos dos meses la persona puede auto flagelarse. Los Cinco estuvieron más de un año y medio en celdas de confinamiento máximo.

  Pidió que se analice como se tipifica dentro de los tratos crueles, inhumanos y degradantes la ausencia de la debida atención médica, en el caso de Ramón con lesión en una rodilla desde hace años. Denunció que junto a la condena, en los casos de Fernando y Gerardo impusieron el castigo de privarlos de la posibilidad de descendencia.

  Enumeró muchos hechos que indican verdaderas prácticas de crueldad y castigo tanto a los Cinco como a sus familiares.

  Castigo que se extiende a todo un pueblo que sigue llorando a sus muertos y comprueba día a día que los responsables de esos crímenes como Luis Posada Carriles, José Basulto, Frómeta o los hermanos Novo Sampoll se encuentran libres, impunes y paseando libremente por las calles de Miami.

  Recordó que en estos días Cuba recibirá los restos de Jesús Cejas Área, víctima de la siniestra Operación  Cóndor, secuestrado en 1976 bajo la dictadura militar de Argentina. En torno a este tema expresó el dolor  que hoy reviven sus familiares por el hallazgo de los restos mortales de este mártir que fue torturado hasta la saciedad por uno de los hermanos Novo Sampol, terrorista confeso al igual que el resto de la mafia criminal de Miami. La misma mafia cuyos crímenes intentaron evitar  Gerardo, René, Fernando, Antonio y Ramón.

 “Los buenos todavía siguen en prisión y van regresando a la Patria por cumplimiento de sus injustas condenas. Los criminales siguen planificando atentados contra la humanidad, tenemos que preguntarnos ¿Es esto o no una forma de tortura?”. Graciela Ramírez entregó a la ACNU una revista en la que constan las cartas enviadas por personalidades de EEUU y otros países al presidente norteamericano Barack Obama, que piden el fin a la tortura y el regreso de Los Cinco a su patria.

  Magali Llort y Mirta Rodríguez, madres de Fernando y Antonio respectivamente reiteraron el necesario llamado a la solidaridad como la única alternativa para una solución al caso de los compatriotas cubanos.

  Al finalizar Zoraya Álvarez, directora general de la ACNU, dio lectura a una declaración de su entidad en la que ratifica el compromiso de denunciar el caso de los Cinco hermanos cubanos en las más altas instancias para que se conozca sus implicaciones internacionales y  aspectos jurídicos escandalosos. Solicitó en el documento a las organizaciones que forman parte del ACNU,  los miembros de la Federación Mundial de Organismos de Naciones Unidas, así como a otras organizaciones de la sociedad civil internacional, que demanden la libertad de los Cinco en defensa de los propósitos y principios para los que fueron creados,  entonces, se hará verdadera justicia.

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