¡Chávez vive, la lucha sigue!
7 de Março de 2013, 21:00 - sem comentários aindaChávez me enseño a creer. No solo en la Revolución o los seres humanos. Me enseñó a creer en las señales que aparecen en el camino de la vida y en su Dios. En Venezuela aprendí a creer en el Cristo de los pobres que se llama Hugo Chávez...
Una de esas señales me llegó esta mañana, sin ni siquiera tener la idea de la gravedad de su estado: ponerme uno de esos pullovers que se hicieron millones durante la campaña electoral de octubre pasado. En mi pecho llevo los ojos de Chávez y su firma, la “rabo de cochino”. Sencillamente, como millones, YO SOY CHÁVEZ. De eso que no le quede dudas a nadie. La semilla que Hugo sembró, germinó en millones.
A Chávez no le conocí personalmente, no pude nunca siquiera verlo de lejos, pero lo conozco de toda la vida, porque como muchos en este mundo, entró en nuestros hogares por la televisión, y se coló en nuestras vidas a fuerza de un carácter único; mezcla insondable de pueblo, de humor, de amor, una responsabilidad a prueba de todo como estadista, con un carisma arrasador de multitudes.
Fidel nos lo descubrió en el ’94. Juntos eran explosivos. Ya no eran solo los gritos de ¡Fidel, Fidel, Fidel!, en cualquier escenario donde se presentaran, era una mezcla de ¡Chávez, Fidel, Chávez, Fidel!
Apenas un par de semanas antes de su última operación recibí una de las noticias más bellas de mi vida. “Tienes una carta que te espera”, escuché al otro lado de la línea. Era una carta del líder de la revolución bolivariana. Al final, luego de su firma y un ¡Hasta la victoria siempre! de esos que calan, escribió:
“Hace poco, en medio de circunstancias muy difíciles, llegué a La Habana como a la media noche, procedente de Caracas. Y de inmediato, el mensaje de Fidel: ‘Díganle a Chávez que yo estaba en Venezuela y acabo de llegar a Cuba’. Así somos…”
Y es que así son esos dos seres, hombres fuera de liga. Dos “diablos” que nos han enseñado que primero están los seres humanos y luego todo lo demás.
Anduve tras Chávez durante meses para completar sus “Cuentos del Arañero” y de esa labor aprendí que su humildad y humanidad -a prueba de balas- hizo que un pueblo entero lo siguiera desde aquel “por ahora” del levantamiento militar del 4 de febrero de 1992.
Chávez bebió desde su cuna de niño pobre lo que era la miseria, las tribulaciones de un pueblo que con el petróleo debajo de sus pies, nunca había calzado un par de zapatos. Por eso no era difícil verlo inventando una misión aquí o una tarea conjunta allá para que la pobreza disminuyera en Venezuela, para que los desposeídos tengan vida digna. Chávez hizo de los pobres el centro de su vida.
Un ser excepcional. Siempre con su tacita de café cerquita y su mano por encima del hombro de cualquier necesitado. Así lo recordaré siempre. Como aquella tarde, que caminando por los alrededores de Miraflores, en busca de espacios para construir nuevas viviendas, se encontró con un joven de la calle, alcohólico, y allí se paró a escuchar de su vida y a tratar de convencerlo de que se dejara ayudar.
Se nos fue. El dolor no es posible describirlo. Caracas es el centro del mundo. Cada venezolano tiene ahora mismo un abrazo desde lejos porque Chávez devolvió Venezuela a la geografía mundial, con oratoria, su irreverencia al poder unipolar, sus frases bíblicas: “Huele a azufre, el diablo estuvo aquí”. Pero más que eso, hizo que las miradas del mundo hicieran de nuestro sur, su norte.
Es imposible abarcar todo lo que significa en la vida de cada uno de los que lo amamos como líder y revolucionario. Seguir escribiendo, sería emborronar cuartillas…
Chávez está en cada obra, son miles de obras, está en cada persona que salió de la pobreza durante sus 14 años de gobierno. Chávez son millones de rostros, pero sobre todas las cosas, Hugo Rafael Chávez Frías, el “Bachaco”, el “Tribilín”, el “Furia” de Sabaneta de Barinas que sembraremos, ya son millones de manos dispuestas a seguir construyendo Patria. ¡Chávez vive, la lucha sigue!
Tomado de Crónicas de Cuba
Hombre fundacional
6 de Março de 2013, 21:00 - sem comentários aindaPor Marcia Medina Cruzata
“Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos
y a partir de este momento es prohibido llorarlos.
Ellos nos serán bandera para abrazarnos con ella
y el que no la pueda alzar que abandone la pelea”.
Alí Primera
Ayer en horas de la tarde el pueblo cubano y la mayoría del mundo escuchaba con consternación la noticia de la desaparición física del Comandante Presidente de la República Bolivariana de Venezuela Hugo Rafael Chávez Frías: nos embargó un sentimiento de deuda con un hombre que fue, es y será un paradigma para los pueblos de Latinoamérica, el Caribe y otros muchos; su vocación humanista, solidaria, patriótica, lo llevan por la senda del ejemplo y presencia constante.
Chávez, de procedencia campesina, como él mismo expresara en diversas entrevistas, llegó a la presidencia de su país y se convirtió en sólo 14 años en un guerrillero de la paz, la dignidad y la fe cristiana que lo acompañó -segura estoy- hasta su último aliento, luchó por sus ciudadanos, por una calidad de vida para los más desprotegidos, y logró articular una LATINOAMÉRICA casi perdida, desorientada y dependiente, no con guerras, ni conspiraciones sino con el convencimiento que trasmitía con sus palabras y con su obra.
Tenía y tengo absoluta esperanza en el proyecto social y económico Chavista, su Socialismo del siglo 21, donde se gobierna con la oposición interna y externa y a pesar de todo se avanza, donde se impulsan programas que benefician a los compatriotas y juntos gobierno y pueblo construyen su nación, su identidad y sentido de pertenencia, donde por primera vez en la palestra mundial se visualiza Venezuela no como apéndice de nadie y hay que contar con ella, donde los electores van directo a las urnas a votar por su presidente, y éste tiene una plataforma de gobierno que cumple, y con objetividad rinde cuenta de su gestión. Por primera vez he visto la política al servicio del pueblo, no el pueblo en función de la política.
Hugo mantuvo hacia su país una transparencia nunca antes vista en toda la problemática que los atañía y un apego indiscutible a lo aprobado en referéndum público en su Carta Magna.
A pesar de todo lo anterior, se han producido algunas manifestaciones de alegría en parte de la oposición, y me recuerda los últimos días de Eva Perón que sus adversarios escribían en las paredes...VIVA EL CÁNCER... ¿de qué hablamos entonces?, de bestialidad, de vileza de falta de humanismo, ¿cómo se pretende gobernar a hombres asumiendo esta postura canallesca, oportunista, baja y sucia?.
Este presidente, que sembró honor, amor, fidelidad y compartió sus sueños, nos ha dado a todos una gran lección, de buen padre, hijo, abuelo, hermano y compañero… mi más sentido pésame a sus familiares y al pueblo venezolano.
Contamos con su legado y la enseñanza de que un mundo mejor sí es posible y que las divergencias de ideologías y criterios en el seno de cualquier gobierno son necesarias para un mejor y eficaz servicio a la Patria, porque nos hace gigantes y abre las puertas reales de la democracia, nos demostró además que es absolutamente cierto lo que expresó José Martí cuando dijo... “Un orador brilla por lo que habla, pero definitivamente queda por lo que hace” o cuando expresó “Los hombres van en dos bandos: los que aman y fundan, los que odian y deshacen”. No sentía este pesar desde la muerte del presidente de Chile Salvador Allende, esperemos que el camino y estrategia trazadas por él continúen, esperemos que no flaquee el pueblo, gobierno y las Fuerzas Armadas, porque Chávez renunció a sí mismo para servir como buen soldado a su país, recordemos una de las partes del Himno Nacional de Venezuela y pensemos con convicción que este hombre dio... VIDA PARA LA VIDA...
La Habana, 6 de marzo de 2013
Los Cinco lamentan muerte de un hermano
6 de Março de 2013, 21:00 - sem comentários aindaMensaje de René González
Queridos allegados al Comandante Chávez:
No por temida la pérdida de ese gran bolivariano nos ha aliviado la consternación. Siempre tuvimos la esperanza de que con ese espíritu indomable nos volviera a decir su firme “por ahora” y que luego, levantándose por sobre las heridas de su cuerpo, el soldado se incorporara para seguir guiando a todo un continente hacia el futuro de justicia que tantas veces le ha sido escamoteado.
No ha podido ser. Pareciera que el precio de ser tan bolivariano es el de extinguirse como el Libertador, como el volcán que todo lo incendia para luego apagarse de súbito. Pero queda la montaña, esa materia que fue lava ardiente, y que tras la extinción de la llama se conviertte en faro, que nos señala inequívocamente el horizonte al que un día llegaremos para rendirnos a sus pies en perpetuo homenaje, las cadenas rotas y el haz martiano de naciones libres como ofrenda.
En las lágrimas viriles que acompañan estas palabras se vierte mi compromiso con la justicia que buscó nuestro hermano Hugo Chávez; compromiso que no cejará mientras me quede un aliento de vida para honrarle con mi conducta. Compromiso que sé multiplicado por cinco en cualquier parte de este imperio cruel a que nos confinen el odio y la venganza.
Tengo fe en el pueblo venezolano, y en que sus lágrimas se fundirán con las de todos los que hoy lo lloramos para dar al mundo una lección de patriotismo. Hugo Chávez, nuestro comandante, está hoy vivo en el corazán de cada hijo digno de Venezuela.
A sus seres queridos, a sus compañeros, al pueblo que tanto quiso, llegue el abrazo propio, el de mi familia y el de los Cinco.
Por ahora Comandante, pero Hasta la Victoria Siempre.
René González Sehwerert
Mensaje de Ramón Labañino
Querido pueblo venezolano
Con extremo dolor y consternación acabamos de recibir la durísima noticias de la partida de nuestro amado Comandante de las Américas, Hugo chávez Frías, y nos unimos al sentir universal por su ausencia tan temprana.
A sus familiares, amigos, hermanos de lucha, todo el amor y las condolencias de los Cinco en momento tan difícil.
Es nuestro deber continuar su ejemplo, su lucha que es la nuestra, por una América realmente libre, independiente y soberana, por la Revolución bolivariana socialista. Solo así hacemos eterna su existencia entre nosotros, que ya lo es.
A nombre de los Cinco, todos nuestros familiares y el pueblo cubano, reciban todo nuestro apoyo y solidaridad, hoy y siempre
¡Chávez vive y vivirá siempre en nuestras almas!
¡Hasta siempre, Comandante!
¡Cinco abrazos!
Antonio Guerrero
René González
Fernando González
Gerardo Hernández
Ramón Labañino Salazar
Marzo 5, 2013
FCI Ashland, Kentucky
50 verdades sobre Hugo Chávez y la Revolución Bolivariana
6 de Março de 2013, 21:00 - sem comentários aindaPor Salim Lamrani, Opera Mundi
*Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris IV-Sorbonne, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de la Reunión y periodista, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Etat de siège. Les sanctions économiques des Etats-Unis contre Cuba, París, Ediciones Estrella, 2011, con un prólogo de Wayne S. Smith y un prefacio de Paul Estrade.
Contacto: lamranisalim@yahoo.fr ; Salim.Lamrani@univ-reunion.fr
Página Facebook: https://www.facebook.com/SalimLamraniOfficiel
Publicado originalmente en Opera Mundi
Al principio será congoja
6 de Março de 2013, 21:00 - sem comentários aindapor Mario Toer*
LA CONGOJA SE TORNARÁ EN OTRA VICTORIA DEL PUEBLO VENEZOLANO
Un estremecimiento recorre nuestra América. Quien fuera el precursor de lo que viene ocurriendo en el continente nos acaba de dejar.
La congoja parte de los cerros que rodean Caracas y se expande por las venas abiertas y palpitantes que recorren montañas y llanuras, pavimentos y arenales.
No es frecuente que una partida como ésta provoque tanto dolor. Suele ocurrir muy de tanto en tanto. Es que la sensibilidad popular es especial, es muy exigente. No se conforma con los bellos discursos y los saludos mediáticos. Capta otras cosas.
Percibe cuando hay alguien que se entrega a su causa sin ninguna especulación. Se da cuenta cuando no hay cálculos ni pretensiones de gloria, cuando la autenticidad fluye sin ningún acartonamiento y con poco respeto por los ceremoniales.
¿Quién hubiese podido percibir el olor a azufre en las Naciones Unidas y referirlo como él lo hizo?
EL MUNDO ENTERO TE HONRARÁ SIEMPRE, COMANDANTE
¿Quién podía ser más explícito para decir en un estadio de Mar del Plata que el ALCA se había ido al carajo?
Como pocas veces su entrega se puso de manifiesto en la última campaña electoral, en la que volvió a imponerse.
¿Quién podía ignorar que no se estaba cuidando, como hubiese sido prudente? Pero sabemos que ésa nunca sería una consideración que pasara por su mente. Sabía que si era su última batalla política debía convocar al pueblo otra vez para seguir adelante. Y lo logró con creces.
Por eso cuando dijo que para cuando no estuviera su voluntad “...firme, plena como la luna llena, irrevocable absoluta, total” era que el compañero Maduro se pusiera al frente, sentimos que se despedía.
SE HA UNIDO YA AL GRUPO DE LIBERTADORES DE AMÉRICA LATINA
Cómo no lo iban a odiar los escuálidos de su país y todos los escuálidos del orbe. Difícil no recordar a alguien al que se le hayan dedicado infinidad de sesudos comentarios descalificatorios en las pantallas de TV de todo el planeta.
El imperio y todos sus escribas diseminaron ríos de tinta para cuestionar sus modales y sus propósitos. El no haberle dado nunca una tregua seguramente resintió su organismo. Pero va a quedar en evidencia que ha sido en vano.
No sé cuántos de estos escuálidos, como los llamó, podrán dejar aflorar su alegría por la partida del comandante. Tiendo a pensar que aún los más primitivos perciben el estremecimiento profundo que recorre las poblados y las ciudades.
En algún lugar de su limitada sensibilidad se dan cuenta de que cuando parte el cuerpo de alguien así, hay algo que queda. Queda repartido en inmensas multitudes, crece y se potencia.
Entonces seguramente sentirán temor. Y se justifica. Es que el dolor así repartido va cambiando su forma. Paulatinamente se transforma en certidumbre y convicción. Y también en alegría, porque en su torno los más comienzan a descubrir que hay muchos nuevos Chávez.
* Sociólogo, Profesor consulto en la Universidad de Buenos Aires, titular de la Cátedra de Política Latinoamericana
Tomado de El Blog de Carlos Tena